La Coordinadora Ecologista de Asturias considera un "error" la decisión de cortar los accesos a la ciudad por la "Y", adoptada por el Ayuntamiento a instancias del Gobierno regional. Según indicó ayer el portavoz de este colectivo, Fructuoso Pontigo, el "verdadero problema" de contaminación durante estos días en Oviedo "no es por partículas derivadas del tráfico, sino por azufre proveniente de una planta química, de una cementera o de una planta de coque".

"Los valores de azufre están disparados tanto en la estación del Palacio de los Deportes como en Trubia o en el Naranco", añadió Pontigo, antes de poner de manifiesto que, contrariamente a lo que está sucediendo en Gijón y en Avilés, la calidad del aire "está empeorando mucho en Oviedo, tanto en medias como en superaciones diarias de los límites permitidos".

"La contaminación en la ciudad lleva disparada desde hace mucho tiempo", afirmó Pontigo, quien considera que las cifras de las estaciones de medición del Principado "son inferiores" a las reales, dado que esas instalaciones "están mal situadas". En el caso concreto de la del Palacio de los Deportes, apunta el ecologista, "está ubicada en el patio de un colegio, por debajo del nivel de calle", y la de Trubia se sitúa "a tres kilómetros de la localidad".

Dióxido de nitrógeno

El portavoz de la Coordinadora subraya que si realmente el problema estuviera siendo ocasionado por los coches, tendrían que haberse disparado los índices de dióxido de nitrógeno, como sucedió en Madrid hace unas semanas. Sin embargo, los niveles de ese contaminante en Oviedo no alcanzan niveles que permitan determinar que proviene exclusivamente del tráfico, apunta Pontigo, que también llama la atención sobre el hecho de que la circulación en los accesos a la ciudad durante estos días es baja por ser "puente" festivo.

La Coordinadora Ecologista de Asturias ya alertó hace ahora justo un mes de un "inusual" y "llamativo" incremento de los registros contaminantes en las El Naranco y en La Corredoria. Fructuoso Pontigo sostuvo entonces que "algo" había sucedido y "afectado a todo el concejo". Aunque reconoció no tener certezas, apuntó que pudo ser causado por "la térmica de Soto de Ribera, las industrias del concejo o las de los alrededores".