Los ayudantes de Melchor, Gaspar y Baltasar en la próxima cabalgata de Reyes no pudieron ocultar ayer su "enorme alegría y emoción" por tener la oportunidad de participar en la gran noche mágica de los niños y contribuir a hacer realidad sus sueños. "Ningún niño de Oviedo se quedará sin juguetes", coincidieron en subrayar.

Paco Colunga (Melchor), Luciano García (Gaspar) y James Hanunu (Baltasar) estaban rebosantes de satisfacción. No es para menos. No podían ocultar sus nervios ante los intensos días que tienen por delante: probar los trajes, recibir a los niños en el Campo San Francisco para atender sus peticiones y, sobre todo, participar en la gran cabalgata en la víspera del 6 de enero. La verdad, estaban como críos.

Luciano García, radiofonista de vocación y de corazón, es el rey que llega con más experiencia. En 1985 ayudó a Baltasar, y dos años más tarde, en medio de una nevada que hizo patinar la carroza real y que lo dejó literalmente helado, hizo lo propio con Gaspar. La nieve acumulada en aquella ocasión fue tal, que tuvo que bajarse del real transporte y hacer a pie -resbalón tras resbalón- el trayecto que lo separaba de la Escuela de Minas, punto de partida y de llegada de la comitiva real.

Luciano García repite con Gaspar. "Es la tercera vez que hago de representante real, pero esta vez estoy viviéndolo de una forma muy especial, con mucha ilusión, porque la cabalgata de ahora es muy distinta, más brillante", comentaba ayer ilusionado. Su cometido le obligará a dejar crecer la barba que se recortó en los últimos años.

¿Lo que más ilusión me hace? "Ver la cara de los niños durante la cabalgata, y ver cómo nos miran y nos quieren. Será una experiencia maravillosa y para mí inolvidable". Luciano García, en su carta a los Reyes, sólo pide "que pueda seguir como hasta ahora, igual que toda la familia".

Paco Colunga, empresario e impulsor del Bulevar de la Sidra, su gran pasión, está orgulloso de ayudar a Melchor. "Es una ilusión tremenda porque tengo mitificada la cabalgata desde niño. Ahora podré hacer felices a los neños, aunque sea por una noche, y eso es lo más grande". En su carta solicita "que los políticos no nos engañen más".

James Hanunu es un nigeriano afincado en Oviedo desde hace cuatro años, donde trabaja de sastre. "Lo último que esperaba era poder ayudar a Baltasar. Me hace mucha ilusión". A los Reyes les pide "paz y salud".