El juzgado de instrucción número 2 de Oviedo admitió esta semana a trámite una querella presentada por la vicealcaldesa Ana Taboada y su partido, Somos Oviedo, contra el exalcalde de la ciudad Agustín Iglesias Caunedo (PP) por subvencionar supuestamente con dinero público a la revista "Vivir Oviedo" para promocionar su figura mientras era el regidor de la ciudad. En el auto, emitido el pasado lunes por la juez y al que tuvo acceso ayer este periódico, el magistrado aprecia "posible existencia de delito de fraude en la contratación pública y malversación de caudales públicos". La querella va dirigida contra Caunedo, el entonces jefe de prensa del Ayuntamiento y el director de la publicación. El pasado mes de julio, la Fiscalía del Principado decidió archivar la misma denuncia del partido podemista al no ver indicios de delito en ninguna de las actuaciones ni apreciar irregularidades ni en la tramitación del expediente ni en el contrato ejecutado.

Esta vez, y tras una nueva denuncia de Somos, la juez ha abierto diligencias previas para conocer si el exalcalde recibió 1.000 ejemplares del número 31 de la revista, publicado el año pasado. En el siguiente número, el 32, Agustín Iglesias Caunedo fue reconocido con el premio "Ovetense del año", galardón que concede la misma publicación.

La juez Simonet Quelle Coto pide en el auto, de dos páginas, que el Ayuntamiento informe al juzgado sobre si se recibieron 1.000 ejemplares del número 31 de esa publicación, "quién los recibió", "dónde se almacenaron" y "cómo se distribuyeron". También reclama a los funcionarios correspondientes que le informen acerca de "si se controló de alguna forma la tirada (5.000 ejemplares) y la distribución que se hizo de la misma en habitaciones de hotel, a personas invitadas a los actos de los Premios Princesa de Asturias o al público en genera".

En la denuncia que presentó Taboada en verano y que fue archivada por la Fiscalía, la líder de Somos consideró que la inserción de anuncios institucionales en la publicación por el Ayuntamiento y la compra de 1.000 ejemplares tuvieron por objeto "ensalzar y publicitar" electoralmente la figura de Caunedo. El ministerio público, sin embargo, la archivó al considerar que ese número no estuvo dedicado a la figura del entonces alcalde sino a otros muchos contenidos relacionados con la actividad cultural de la ciudad como los Premios Príncipe de Asturias, la Noche Blanca, el Santo Sudario, la Universidad de Oviedo, la programación del Auditorio o el Campoamor. La Fiscalía subrayó además que "tampoco cabe considerar que se hubiesen destinado caudales a usos ajenos a la función pública" porque, apuntó, "la publicidad sobre la oferta cultural de Oviedo, con independencia de que sea del agrado o no, fomenta el turismo con el consiguiente beneficio para importantes sectores económicos".