El grupo de moteros Malos Asturies celebró, como viene siendo tradición, su cena de Navidad, a la que acudieron más de un centenar de integrantes de uno de los clubes de aficionados alas dos ruedas, emblemáticos en Asturias. Algunos de ellos dejaron el pabellón bien alto y resistieron hasta altas horas de la madrugada. El grupo, fundado en Oviedo hace más de 20 años, se reunió en un hotel para disfrutar de la velada. Habitualmente se juntan para hacer rutas en moto, dentro y fuera de Asturias y su centro neurálgico es un establecimiento de la calle Llano Ponte.