"El corazón humano ha avanzado poco a lo largo de la historia". Esa es la conclusión de la escritora Matilde García-Mauriño al llegar al tercer volumen de su saga sobre la Reconquista. García-Mauriño, ovetense afincada en Gijón desde su juventud, presentó ayer en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA sus dos últimos libros: "Ocho reyes y un califa", la tercera entrega de su serie histórica sobre la monarquía asturiana, y "A donde los ojos me llevan", una crónica personal.

La autora comentó algunas curiosidades de los protagonistas de su nueva novela, como que Abderramán I era rubio, de tez blanca y ojos azules, porque su dinastía era de origen Sirio. Habló de las batallas e intrigas que se desenvuelven en "Ocho reyes y un califa" y afirmó que "la infancia da fuerza a la madurez", razón por la que disfruta tomando a los personajes en sus primeros años y siguiéndolos hasta su época adulta.

Su segundo libro es más singular. En él, explicó ayer, cuenta cómo durante trece días, tras una operación de cadera, estuvo viendo visiones. Asegura que "todo era bonito" y "coherente" y su editor, Juan Méjica, le animó a darle forma literaria.

La semana que viene Matilde Garcia-Mauriño presentará sus dos libros en la Casa del Libro de Gran Vía, en Madrid.

El abogado, escritor y editor de la obra de García-Mauriño Juan Méjica presentó sus obras como dos libros muy diferentes, de una escritora clásica al estilo de Pérez Galdós. "La novela histórica de Matilde esta caracterizada por la verosimilitud", destacó. Se trata de luchas, amores e intrigas, en párrafos cortos, "fáciles de leer, que no simples", sintetizó Juan Méjica. "Adonde los ojos me llevan", sin embargo, es "una crónica personal", con "estampas muy vívidas, que lo acercan a los videoclips musicales", según Méjica.