Santiago Martínez, profesor del departamento de Historia de la Universidad de Navarra, analizo ayer en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA la brecha abierta en Oriente Medio y los conflictos que agitan la zona, "un tema, por desgracia, de actualidad" y "muy complejo". En un acto organizado en colaboración con Alumni, la asociación de antiguos alumnos de la Universidad de Navarra, y tras hacer un repaso de la situación que ha conducido a millones de personas a buscar refugio en Europa huyendo de la guerra, Santiago Martínez concluyó que "Occidente se comporta con cinismo: esto es un enorme negocio y los países occidentales no están dispuestos a dejar de invertir dinero".

El profesor, licenciado por la Universidad de Sevilla y doctorado en Navarra, explicó que Arabia Saudí, cuyos fondos controlan muchas de las empresas del IBEX35 y que maneja enormes reservas de petróleo, exporta la versión más estricta del islam a los países de su entorno y a Europa y "ningún país, cuando hace negocios con Arabia Saudí, está en condiciones de exigirle libertades".

"El estado islámico es suni y odia a muerte a los chiis", expuso Martínez, cuya conferencia fue presentada por el secretario de Alumni Asturias, Kiko González. Ese odio se extiende a los cristianos y, con la imposición de restricciones y castigos, está detrás del éxodo masivo de población. "Siria tenía unos 22 millones de habitantes antes de la guerra y la mitad ha salido del país", indicó.

"El estado islámico esta haciendo una limpieza religiosa y acabando con la tradición de tolerancia musulmana con el cristianismo", indicó Santiago Martínez. La tolerancia con estos movimientos extremistas por parte de Occidente está fundamentada en el negocio de las armas y el petróleo y por el interés por mantener su presencia en un área geoestratégica de gran importancia, según el historiador.

"Hay tres rivales que se rifan la influencia en ese área. Uno es Irán, un país chií; otro Arabia saudí, suní, un país riquísimo, y Turquía, que tiene una actitud muy sibilina y muchas tensiones sobre lo que quiere ser. También están implicadas Rusia y Estados Unidos: Siria es el único aliado que le queda a Rusia, Estados Unidos tiene muchos en la zona", expuso.

Martínez se refirió al aluvión de refugiados que ha llegado a Europa, al cambio de actitud hacia ellos tras los atentados de París y los sucesos de Colonia y al excelente aparato de propaganda del ISIS, que presume de haber infiltrado a cinco mil acólitos en Europa entre los exiliados.