"El asunto, por mi parte, queda aparcado". Gabino de Lorenzo no quiso avivar ayer el debate sobre el futuro del PP asturiano que él mismo había iniciado esta semana cuando apostó por un congreso abierto a toda la militancia y consideró "idóneo" el perfil del portavoz popular en el ayuntamiento de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, para disputar la presidencia regional del partido a Mercedes Fernández.

De Lorenzo consideró "lógico" que el portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, saliera en apoyo de Mercedes Fernández el pasado viernes, cuando dijo que "hay que respaldarla ahora, y cuando llegue el momento del congreso regional, después del nacional, ya veremos". Hernando también manifestó que abrir "batallas estériles, no contribuye en nada a lo que necesita el PP".

"De momento no se toca más este asunto, que quizás salió inoportunamente, y queda aparcado hasta que toque", declaró ayer De Lorenzo a LA NUEVA ESPAÑA. El exalcalde admitió que el debate sobre la renovación del partido en Asturias queda a expensas del inicio de los procesos congresuales, que deberán arrancar con el cónclave nacional, que por ahora ni siquiera tiene fecha, a la espera de que se despejen las incertidumbres sobre el Gobierno de España y sobre si serán necesarias unas nuevas elecciones generales.

Las palabras de De Lorenzo, que también negó que en el PP asturiano hubiera el desastre económico que Mercedes Fernández declaró a la juez instructora del "caso Pokémon", no sentaron nada bien en la dirección regional del PP; primero guardó silencio y al día siguiente contestó a través de su presidenta, Mercedes Fernández, quien situó las manifestaciones en clave "de despedida" de la política por parte del delegado del Gobierno en Asturias y, además, las calificó de "burbujeantes".