La de la peña oviedista de Argentina es una de esas historias que engrandecen al Oviedo. Tener al otro del océano a un grupo de acérrimos seguidores que se reúnen cada semana para ver los partidos y hablar sobre un club que les fue seduciendo más a medida que lo fueron conociendo es un tesoro del que no todos pueden presumir. Con el Oviedo sucede muchas veces que sus peores momentos fueron los que acabaron por hacerlo más singular, más atractivo. Equipos con una afición fiel en Primera hay muchos, pero que sientan tan respaldados como lo estuvo el Oviedo cuando pasó por Tercera hay muy pocos.
La de Argentina es una peña que se fundó hace ahora 20 años, en 1996. Y sucedió por la presencia de jugadores argentinos en el Oviedo y por una razón mucho más singular: el PC Fútbol. Ese juego que permitía a cualquier aficionado ponerse en el lugar del presidente de cualquier club y llevarlo hasta las más altas cotas. Más que jugar partidos se trataba de fichar, subir equipos, vender jugadores, ampliar campos y tantas otras cosas que este simulador permitía hacer.
Uno de los sueños que han podido cumplir los miembros de esta peña ha sido el de pisar el Tartiere, visitar Oviedo, ver en directo un partido del conjunto azul. Y para ello han necesitado del apoyo de otros oviedistas, como los de la Peña Azul Olivares, que han colaborado con ellos en el largo proceso para recaudar fondos que hicieran posible este viaje, esta experiencia que aún están viviendo. Hoy estarán en Alcorcón viendo al Oviedo en un partido especial y en el que precisamente Sergio Egea, el argentino que llevó al Oviedo de vuelta a Segunda, no estará sentado en el banquillo al frente del conjunto azul tras 20 meses al frente.
Uno de los cuatro miembros de la peña que ha viajado hasta Oviedo es su presidente, Leandro Alexandre. Explica cómo ha sido el proceso para recaudar los fondos que les han permitido venir: "La gente de la Peña Azul Olivares ha colaborado con nosotros. También la APARO nos ha ayudado con el viaje y el club, a través de Miguel Sanz. Hace más de tres años que llevamos planeándolo. Hicimos camisetas, bufandas y las mandamos aquí para venderlas". Y una vez aquí el recibimiento ha sido mejor todavía de lo que esperaban: "La recepción de la gente, la atención del club, estar en el campo durante un partido, la visita al museo, la afición... Ha sido todo espectacular".
Lo cierto es que lo único que les falló fue el resultado (2-4) que cosechó el equipo ante el Valladolid. "Fue un partido complicado", explica Leandro. También les ha cogido aquí la dimisión de su compatriota Sergio Egea, uno de sus ídolos en el club: "Para nosotros es un orgullo que un argentino haya sacado al Oviedo de Segunda B". Un orgullo es también para ellos "el comportamiento" que ha tenido el que hasta la pasada jornada era el técnico de los azules.
El día antes del 90º aniversario tendrán que emprender el viaje de vuelta a Argentina. Allí, Leandro Alexandre, Martín Gatti, Hermes Garreffa y Juan Manuel Peláez seguirán reuniéndose cada semana en el centro de Rosario, en el café Dalmacio, para seguir difundiendo el oviedismo al otro lado del océano.
