La varicela está incluida desde ayer en el calendario de vacunación de la comunidad asturiana para niños de edades tempranas. La pediatra Laura García Riaño, del centro de salud de Ventanielles, no detectó especial expectación durante la mañana en su consulta por la nueva vacuna y explicó que "la varicela no causa mucha preocupación a las familias, que demandan más otras como la meningitis B". Tampoco en las farmacias percibieron más interés que de costumbre.

La vacuna se administrará, gratuitamente y a través de los servicios de Pediatría de los centros de salud, en dos dosis: la primera a los 15 meses y la segunda a los tres años. Hasta ahora se ponía en una sola, a los 10 años, si los niños no habían pasado antes la enfermedad y se habían inmunizado de forma natural.

Las familias podían costear las vacunas de la varicela de su bolsillo, pero eso no fue siempre tan fácil. En el año 2013 el Ministerio de Sanidad bloqueó los lotes de la vacuna para evitar los abusos que consideraba que se estaban dando en su administración, y las farmacias quedaron desabastecidas. Algunas familias recurrieron al "tráfico" de vacunas, que adquirían en Portugal, Andorra o en otros países próximos. Hace un par de meses se normalizó la situación y pueden adquirirse sin problemas en cualquier farmacia.

La doctora Laura García Riaño explica que, con el nuevo calendario, los niños serán vacunados a los quince meses y a los tres años. Para los bebés que tienen más de 15 meses hay dos posibilidades, indicó: que la familia compre la primera dosis en la farmacia y que a los tres años reciba la segunda, ya a cargo de la Administración, o bien que espere a los tres años a ponerle la primera dosis y la refuerce a los 10 con la segunda, en este caso ambas gratuitamente.

Los niños que han cumplido los tres años no tienen más remedio que esperar a los diez si quieren ser vacunados a cuenta de los servicios públicos.

García Riaño afirma que la cobertura de la vacuna de la varicela es muy amplia ya desde la aplicación de la primera dosis, con la que se logra una efectividad de entre el 80 y 85 por ciento.

Los pediatras de los centros de salud del Principado, añadió Laura García Riaño, prescribían gratuitamente la vacuna de la varicela para los niños que presentaban factores de riesgo añadidos, como problemas inmunológicos o dermatitis atópica, independientemente de su edad.