El pianista coreano David Huh, en la fotografía, ofreció ayer un gran concierto en la Filarmónica, abierto con "L'Alouette Calandrelle", de Messiaen y la sonata "Los Adioses", de Beethoven, desarrollada a la perfección. Después, las variaciones sobre un tema de Corelli, de Rachmaninov y la sonata en si menor de Liszt, brillante y soberbia en sus manos.