Los funcionarios de la Unidad de Policía Científica de Oviedo continuaban ayer recabando pruebas en el edificio del incendio. Su labor es determinar la causa y también las circunstancias de un fuego, que según las primeras hipótesis se originó en unos óculos de la primera planta del edificio y de ahí se propagó a la segunda, con el suelo de madera. Los policías también investigan si el edificio, cuyas vigas también eran de madera, estaba tratado con algún tipo de producto químico (barnices y protectores contra la carcoma) que haya podido actuar como acelerante, lo que explicaría la virulencia de las llamas. Los policías de la Unidad Científica se desplazaron por primera vez a la calle Uría el jueves de la semana pasada, dirigidos por el jefe de la brigada, el veterano experto en investigación de incendios Isaac Carrera Carbajo. Hasta que la Policía concluya sus pesquisas en el escenario del incendio, nadie puede acceder al edificio, para evitar la contaminación de las pruebas.
