Un año más llega la Feria de la Ascensión, que se celebrará del 6 al 8 de mayo, y en esta ocasión lo hará recuperando lo mejor de su esencia, que no es otra que estrechar aún más los lazos entre el campo y la capital. Éste fue su origen y a él retorna.

Por eso, la Sociedad Ovetense de Festejos (SOF) ha recuperado el desfile folclórico, que volverá a recorrer la calle Uría después de cinco años, "lo que supuso un esfuerzo, pero seguro que merecerá la pena", puntualizó Javier Batalla, director de la SOF, que andaba empeñado en conseguir este objetivo; igual que el de devolver al municipio, después de quince años, la feria ganadera, que se celebrará en el polígono de Olloniego-Tudela, con más espacio y mejores comunicaciones que cuando se organizaba en Llanera.

Una cita agrícola y ganadera que en esta edición incluirá también desde muestras de productos asturianos hasta manifestaciones folclóricas, pasando por la mitología asturiana.

Otra de las ideas era la de dotar de actividades permanentes todas las exposiciones con manifestaciones gastronómicas, folclóricas y teatrales, lo que para esta edición también se consiguió. Además, el mercáu astur recupera el espacio de la plaza de Porlier, y los deportes autóctonos adquirirán una mayor dimensión.

Pero desde la SOF saben que aún quedan cosas por hacer para que esta gran fiesta de primavera de Oviedo, que al final es de toda Asturias, cuente con una mayor representación de otros municipios de la región. Por eso, Cangas del Narcea, Villaviciosa y Llanes estarán presentes, entre otros, para la siguiente edición. En definitiva, comienza una nueva etapa para la Feria de la Ascensión.