"La investigación sobre nuevos materiales ha encontrado en la nanotecnología una poderosa herramienta de diseño que nos permite obtener materiales con combinaciones de propiedades que llegan a resultar sorprendentes", afirmó ayer el responsable de la Unidad de Desarrollo de Materiales Multifuncionales del Instituto Nacional del Carbón (Incar), Adolfo Fernández Valdés, durante la conferencia que pronunció en el Club Prensa Asturiana de LA NUEVA ESPAÑA. Entre algunas revelaciones, el científico explicó que la nanotecnología no es cuestión del siglo XXI. "Hay evidencias de que ya en tiempos muy remotos se hacía uso de la nanotecnología, aunque fuese de manera inconsciente, sin saberlo", comentó, para después añadir que "es en los últimos años cuando se están explorando con mayor intensidad todas sus muchas ventajas en la manipulación de materiales".
Antes había explicado qué es la nanotecnología: "Se puede definir como la ciencia que interviene en el diseño, la producción y el empleo de estructuras que cuentan con al menos una de sus dimensiones en la escala de los nanómetros, esto es, del orden de la millonésima parte de un milímetro".
La intervención del científico respondió a una nueva entrega del ciclo de conferencias que organiza el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) bajo el título ¿Qué sabemos de?? En esta ocasión, el programa señalaba a "La nanotecnología como vía de obtención de una nueva generación de materiales".
La cita atrajo a numeroso público al Club Prensa Asturiana. En un costado de la sala seguía la conferencia con atención el alcalde de Oviedo, Wenceslao López, también estaba el científico ovetense Amador Menéndez Velázquez, que obtuvo el Premio Europeo de Divulgación Científica por su trabajo acerca de la nanotecnología.
Rosa Menéndez, delegada institucional del CSIC en Asturias, se encargó de la presentación del acto. "Los científicos estamos comprometidos con la divulgación para dar a conocer a la sociedad nuestros trabajos y avances", comentó antes de dibujar el perfil científico del ponente.
Adolfo Fernández abordó las enormes posibilidades de la nanotecnología. Entre otras, su influencia "en el diseño de nuevos materiales que sean más resistentes", como todo tipo de prótesis, para conseguir que aumenten su duración, que hasta ahora oscila entre los diez y los quince años. Para eso, con la ayuda de la nanotecnología están trabajando en busca de estructuras porosas cada vez más similares a los huesos.
Las cerámicas policristalinas, o sofisticadas herramientas de cortes, "en las que se mejora su dureza y tenacidad incorporando alúmina y partículas de metal", son otras posibilidades, sin dejar de lado algunos campos tan relevantes como la tecnología aeroespacial. Aquí, la nanotecnología se aplica en los espejos de los satélites o en la cerámica que recubre las naves espaciales, para que resistan a temperaturas extremas.
