Libroviedo tiene una programación infantil con talleres, cuentacuentos y actividades lúdicas para los niños. Se inició ayer, por la mañana, con "Los molinos de don Quijote", un taller en el que los chiquillos aprendieron a hacer molinillos de viento y continuó con una sesión de "minicuentos, microrrelatos y cuentículos del mundo, que con el título de "La mejor sopa del mundo" ofrecieron los voluntarios de "Clowntigo". La asociación de payasos, que visita los hospitales animando a los niños enfermos, mantuvo un expositor informativo durante todo el día en la feria. La oferta recreativa continuó por la tarde, con un taller de marcapáginas. Hoy los niños tendrán otra oportunidad de aprender a diseñar sus propios marcapáginas, a las seis de la tarde, y Cervantes campará por la feria por la mañana, con el taller "Los ingenios de don Quijote".