La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El parque para perros de Foncalada "no es insalubre", dicen los usuarios

Los dueños de las mascotas replican a los vecinos y afirman que son "los primeros en recoger los excrementos"

Por la izquierda, Belén Álvarez, Carmen Argüelles y Miguel Plans, ayer, en el parque para perros de la plaza Ana García, junto a Foncalada. PEDRO H.

En el parque para perros situado en el entorno de la Foncalada -concretamente en la Plaza Ana García- no se generan malos olores, tampoco hay ruidos y los usuarios recogen los excrementos de sus mascotas para mantener limpio el recinto. Al menos esa es postura que mantiene la asociación Perros y Asociados, un colectivo de personas que acude a diario al parque con sus animales y que desde hace tiempo mantiene un enfrentamiento con la comunidad de vecinos del edificio cercano al parque. La asociación Perros y Asociados considera que las quejas que llegan desde el edificio no están justificadas y que los únicos perjudicados en este conflicto son ellos. "Nos han llegado a lanzar huevos crudos, cocidos y yogures desde alguna ventana", señala Miguel Plans, el presidente del colectivo.

La asociación de Plans ya ha denunciado en varias ocasiones la presencia "dentro y fuera del parque" de "sobres de raticida" y de "un rosario de alimentos presuntamente envenenados, como zancas de pollo, carne, costilla, queso o salchichas". Perros y Asociados tiene presentadas dos denuncias por la supuesta aparición de pastillas de raticida y llegó a reunirse con el concejal de Seguridad Ciudadana, Ricardo Fernández, para solicitar la presencia de un coche policial en la zona. "Puedo asegurar que los habituales del parque somos los primeros que recogemos los excrementos de nuestros perros. Otra cosa es que haya gente incívica que no recoja los del suyo, por eso colocamos un cartel que pone que denunciaremos a quien se comporte así", asegura Plans. "Este parque no es ni mucho menos un foco de suciedad ni es insalubre", añade el presidente del colectivo, que ayer se encontraba en el recinto con su perra "Lluna" y con dos miembros más de su asociación, Belén Álvarez y Carmen Argüelles.

Los miembros de la asociación Perros y Asociados tampoco entienden las quejas de los vecinos por los ruidos. "El que se vaya al parque a las siete de la mañana es normal. Sacamos a nuestras mascotas antes de irnos a trabajar, a media mañana, después de comer y después de cenar, pero los ruidos son los normales", subraya Miguel Plans. El presidente del grupo de usuarios del parque para perros situado en la Plaza Ana García espera que las cosas vuelvan a su cauce "porque los animales en algún sitio tienen que estar y aquí se cumple con toda la normativa".

Compartir el artículo

stats