Si algo disfruta con intensidad Oscar Salas, natural de Llantrales, en la parroquia de La Mata, en Grado, y residente en Oviedo, es cocinando y compartiendo, con vecinos, amigos y familiares, lo que con tanto gusto prepara ante los fogones. " Fui albañil. Me gustaba mucho la enseñanza y estuve en talleres de empleo 22 años. A los 50 tuve un infarto por estrés, que cambió radicalmente mi existencia y a partir de entonces fue cuando la gastronomía y la cocina, comenzó a ser una parte importante en mi vida", señala.
Oscar Salas es un hombre entrañable que habla con pasión sobre cómo disfruta cocinando. "Lo primero que hice fue arroz con leche siguiendo la receta que me dio mi madre después de muchos años. Una auténtica joya. A ella se la había dado mi abuela. Mi madre lo hacía siempre en la noche de San Juan. Mi hija me la ha pedido pero tendrá que esperar", dice sonriendo mientras va cortando los callos de bacalao en su casa de Grado, en cuya zona baja tiene un amplio merendero.
"Comparto la afición a la cocina con los amigos y tengo aquí mi rincón favorito. Esta casa y el merendero es mi sitio, mi lugar, mi nido, donde cocino cada dos por tres para diez e incluso hasta 30 personas. Tengo mi horno para hacer pan, lo elaboro de escanda, hago bollos preñaos de chorizo y morcilla, en fin, que me encanta estar aquí cocinando", afirma. En La Mata llegó a preparar una gran paella y arroz con leche para más de doscientas personas.
Tanto gusto ha cogido a la cocina y lo hace tan bien que ya ha ganado varios concursos en diferentes lugares de Asturias, llegando a ser primera página en este periódico tras ganar el concurso de tortillas de Candamo. "En 2009 empecé a concursar por Asturias y gané el primer premio en el concurso de arroz con leche de San Juan de Villapañada, en Grado, y también me llevé el primero en el concurso de tortillas de Candamo. Aquí he ganado todos los años menos uno. En Cabranes, en el concurso de arroz con leche en 2011 saqué el tercer premio. Este año 2016 gané también el concurso de tortillas de Jomezana de Abajo en Lena. También me presenté en el concurso de fabada de Villaviciosa pero quedé en el cuarto puesto con mis fabas con callos de bacalao, que inventé yo. Soy un autodidacta y me gusta mucho crear mis propios platos", matiza.
Cada día camina tres horas y una vez al mes va a pie hasta Grado y queda con los amigos. Si cocinar le satisface, esta satisfacción ya es completa cuando ve como los demás disfrutan con sus elaboraciones. No cabe duda que este año caerán mas premios.
