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Más de 40 años de "oír, ver y callar"

"Escribiré un libro pero no me meteré con el trabajo de nadie", afirma al jubilarse Marcelino Martínez, el funcionario más antiguo de la Delegación del Gobierno

Marcelino Martínez Cárcaba. IRMA COLLÍN

Marcelino Martínez Cárcaba (Oviedo, 1951) tiene por lema "oír, ver y callar" desde los 21 años. A esa edad entró a trabajar por oposición en la Secretaría de Estado de Administraciones Públicas y se acostumbró "a cambiar de jefe" periódicamente: desde la época predemocrática pasando por la transición y hasta el siglo XXI. Estuvo bajo las órdenes del gobernador civil Victorino Angüera Sansó; del ex delegado de gobierno, Fernando Fernández-Noval, de la ahora presidenta del PP asturiano, Mercedes Fernández, del diputado del PSOE por Asturias, Antonio Trevín, o, en la actualidad de Gabino de Lorenzo, entre otros. Por mucho que se le pregunta por ellos, por su forma de actuar, sus gustos o sus manías, Marcelino sólo dice que "hay dos que no cumplieron bien con su deber y son de partidos diferentes". Y deja al interlocutor con la intriga. El funcionario más antiguo de la Delegación del Gobierno en Asturias se jubila este mes tras 44 años de servicio dejando muy buen recuerdo. De hecho, ayer recibió un homenaje organizado por la propia Delegación en un restaurante de Latores.

Marcelino prefiere esperar para contar más cosas. "Escribiré un libro, pero no me meteré con el trabajo de nadie porque la política es muy aburrida", dice. Lo tiene bastante avanzado. Como mucho, hablará de quién se quedó a vivir en el piso de la plaza de España (sede de la Delegación del Gobierno) o de qué color pintaban la casa cada vez que llegaba un nuevo inquilino. Y es que lo suyo, además de la organización del parque móvil, la asignación de los coches a los altos cargos o el papeleo, es el espectáculo y el cine.

No canta, ni baila, pero sabe mucho de artistas. Colaboró en la programación musical de la desaparecida Herradura del Campo San Francisco en los tiempos en que Pedro Obegero era el presidente de la Sociedad Ovetense de Festejos (SOF). "Lo único que yo hacía era controlar el cotarro y pagar a los que actuaban", explica frente a la biblioteca de la Granja, en pleno pulmón de Oviedo, haciendo gala de su discreción. Lo cierto es que Marcelino habló con Lola Flores, un joven Raphael, Camilo Sesto en pleno éxito de "Jesucristo Superstar" o Rosa María Lobo. "Eran todos muy cordiales. Eso sí, a Lola no le importaba echar el tiempo que hiciera falta. Si el público le pedía otro pase, se arrancaba y lo hacía".

Cuando más se anima a hablar este funcionario es para referirse a las fiestas de Oviedo y de Las Regueras, el concejo en el que vive y en donde fue concejal de Cultura, teniente de Alcalde y Alcalde en funciones en sustitución del titular Joaquín Aza, a caballo entre los setenta y los ochenta.

Pasión por Kubrick

En este municipio editó una revista, instauró las primeras fiestas para niños y jubilados y, cómo no, organizó galas y romerías, sobre todo en El Escamplero. Así, Massiel, Ángela Carrasco o Radio Topolino pisaron el escenario.

Pero si algo le gusta a Marcelino es Stanley Kubrick. Su pasión por las películas del director americano le llevaron a colaborar en programas como "Polvo de Estrellas", del periodista Carlos Pumares, en las madrugadas de la desaparecida Antena 3 Radio. "Ni sé si sabe que la escena de las niñas gemelas en el pasillo del hotel de la película 'El resplandor' le costó tres meses de grabación a Kubrick. Es sublime". Lo dice con vehemencia y sin pestañear, igual que hizo años atrás en varios programas de televisiones locales para referirse a las actividades de Las Regueras.

Marcelino Martínez Cárcaba tiene mucho que contar, pero le gusta dejar a su público en suspense.

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