La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

¿Cómo afrontar mejor los cambios en nuestros hábitos de alimentación?

Diseñar una estrategia centrada en los beneficios de una dieta equilibrada ayuda l Conviene actuar sin prisa

Hoy en día, son muchas las personas conscientes de la repercusión que tiene sobre nuestra salud adoptar una dieta equilibrada y variada. No obstante, adquirir nuevos hábitos alimenticios no es una tarea fácil, por el contrario, requiere de un gran esfuerzo para realizar un cambio de conducta, que suele convertirse en una constante y agotadora lucha interna.

Frecuentemente se efectúa la modificación sin disponer de una planificación, proyectando únicamente el desenlace deseado, obviando las posibles dificultades o intentando abarcar todas las correcciones alimentarias de manera simultánea. Esta circunstancia puede terminar en decepción, falta de motivación y abandono.

Es importante anticipar una estrategia que contenga como fase inicial el establecimiento del objetivo, definiéndolo de forma concreta y clara. Ese fin debe ser suficientemente significativo para ser capaz de evocar y renovar la motivación original. También hay que tener presentes los beneficios del cambio frente a los inconvenientes, algo que contribuye al mantenimiento y justificación de nuestros propósitos.

Antes de ejecutar los objetivos, es preciso identificar los obstáculos o barreras probables y prever una respuesta efectiva. Dicho de otra forma, anticipar una conducta más adaptativa ante las dificultades más importantes. Para ello podemos recurrir a técnicas como la de "solución de problemas", debiendo registrar todas las alternativas que nos surjan por cada obstáculo definido, aunque en un primer momento puedan parecer absurdas, analizando la opción más viable y evaluando su adecuación una vez realizada.

Sin embargo muchas de esta dificultades pueden no tener una solución factible: por ejemplo depender de factores externos imposibles de conseguir o el requerimiento de terceras personas no dispuestas a colaborar o corresponden habitualmente a procesos internos como un escaso control emocional, evaluaciones mentales negativa recurrentes y resistencia a sensaciones físicas percibidas como desagradables, que precisan de la elección de opciones más apropiadas. Algunas soluciones pueden ser la relajación progresiva, técnicas de respiración o la "atención plena".

Ésta última también denominada "Mindfulness", nos ubica en el aquí y ahora. Posibilita, mediante su entrenamiento, la habilidad de situar la atención de forma intencionada en el momento presente, con una actitud caracterizada por la ecuanimidad, facilitando el autocontrol y la adaptación a estos conflictos.

Por otra parte, en ocasiones es preferible iniciar los cambios paulatinamente, de forma que podamos simplificar la tarea y adquirir más confianza y sensación de control.

Cabe señalar que en ocasiones se hace necesario el asesoramiento de profesionales cualificados tales como dietistas y psicólogos, capaces de orientar y acompañar en la consecución de nuestros objetivos, adaptando las estrategias más adecuadas a las características personales.

Teléfono de la Esperanza 985225540

Compartir el artículo

stats