La Guardería Rural del Principado comenzará este lunes a realizar batidas de jabalíes en el monte Naranco. Es la respuesta de la administración regional a la petición de ayuda del Ayuntamiento de Oviedo ante el aumento de incursiones nocturnas de cerdos salvajes en la zona urbana. Además, las batidas se realizarán sin cupo, en base a una ley que permite muertes a discreción, al entrar en juego la seguridad de las personas, según informaron fuentes del gobierno regional.

Los guardas rurales realizarán las batidas en colaboración con agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local de Oviedo, siguiendo un protocolo de seguridad, de manera que los vecinos de la zona serán alertados antes de la cacería, para evitar accidentes. Las mismas fuentes consultadas en el Principado explicaron que si bien no existe un censo de jabalíes en Oviedo, tanto en este municipio como en el resto de la región, hay "superpoblación" de esta especie, lo que provoca constantes situaciones de conflicto, como sucede ahora en la capital asturiana.

El concejal de Seguridad Ciudadana, Ricardo Fernández, se dirigió el pasado jueves al Principado pidiendo a la administración que tomase medidas ante "la creciente presencia" de jabalíes en varias zonas del casco urbano y otros núcleos de población del municipio. En base a los informes de la Policía Local, el Ayuntamiento comunicó, además, que la situación se había vuelto peligrosa para la seguridad de las personas. "El jabalí no se asusta de la presencia de las personas y se vuelve agresivo cuando se le quiere espantar, con el peligro que puede suponer para los vecinos", recogieron en un parte de intervención los agentes de la Policía Local, tras encontrarse con un jabalí con siete crías en el entorno de la pista Finlandesa.

"La Policía Local ha constatado un notable incremento de denuncias por la presencia de jabalíes en las últimas semanas. En consecuencia, también se han incrementado las intervenciones de los agentes para montear los animales por las calles guiándolos hasta su hábitat natural", denunció el Ayuntamiento.

Las últimas intervenciones tuvieron lugar en la madrugada del jueves en Trubia y en el barrio ovetense de Vallobín. Sin embargo, la más llamativa de todas se desarrolló durante la madrugada del pasado 21 de mayo, cuando varias patrullas de la Policía Local tuvieron que montear a un jabalí de unos sesenta kilos de peso desde los jardines del palacete de Villa Magdalena, hasta el barrio de Las Campas, para devolverlo a su hábitat natural, en el monte Naranco.