Mercedes Fernández pidió explicaciones por la mañana y, por la tarde, pocas horas después, Agustín Iglesias Caunedo se las dio. El líder popular en la ciudad, americana azul, camisa blanca y sin corbata, asistió al comité regional del partido conservador, celebrado en el Auditorio, para dar la cara ante los suyos tras la sentencia del juzgado contencioso administrativo número tres, que condenó al Ayuntamiento al pago de 25 millones de euros a la empresa Jovellanos XXI en concepto de liquidación por cancelar el contrato de su explotación.

Caunedo insistió en las explicaciones que ofreció ya el martes, tras el pleno celebrado en el Ayuntamiento. Dijo que la rescisión del contrato fue acordada por todos los partidos, que fue amparada por varios tribunales (incluida la Fiscalía, que pidió el archivo del caso) y que estaba amparada por informes técnicos e incluso en la comisión de investigación. Y recordó que en el origen de la operación, que se comienza a fraguar a principios del presente siglo, no estaba en la Corporación municipal. "Yo llegué al Ayuntamiento en el año 2003. Lo que me tocó a mí fue rescindir el contrato. Fue una decisión consensuada que se hizo con todas las de la ley", señaló Caunedo en conversación con este diario, e insistió que fue una decisión que "fue refrendada por los tribunales". El juez, no obstante, declara nula esta decisión en la sentencia.

Caunedo, que asistió al comité regional después de mucho tiempo sin hacerlo, recordó ante la presidenta que durante los años que estuvo de alcalde (2012-2015) disminuyó la deuda del Ayuntamiento a la mitad, de 136 millones a 68. Además, aseguró que el trato con Mercedes Fernández durante el acto fue "cordial" y que agradeció las explicaciones ofrecidas.