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La Lila

Los socavones de la Lila irritan a los residentes, que piden su reparación

"Parece que ha caído una bomba", dice el líder vecinal Gonzalo Otero

Algunos de los baches y baldosas en mal estado de la Lila. LNE

"Parece que han tirado una bomba en medio de la calle, está toda llena de agujeros". Gonzalo Otero, el presidente de la asociación de vecinos "Longoria Carbajal", se refiere a la Lila, al estado "de abandono total" en el que se encuentra "una de las principales calles del centro de Oviedo". Otero no es el único que protesta por "la falta de mantenimiento" en la vía, otros vecinos del entorno, los taxistas y los propietarios de algunos negocios ubicados en la calle también han mostrado su descontento con el Ayuntamiento por el estado de la Lila. "Lleva bastante tiempo así. La verdad es que cuando pasas con el coche te da la sensación de estar atravesando un camino de cabras en medio del monte", explica un taxista que prefiere mantenerse en el anonimato.

Los baches y socavones, según denuncia Otero, "se extienden a lo largo de toda la calle de la Lila, desde arriba hasta abajo". En su opinión, "la situación es un desastre" y como portavoz de la asociación a la que representa le exige al tripartito que gobierna en la ciudad (Somos, PSOE e IU) "que se dejen de discutir entre ellos y que se pongan a trabajar para solucionar los problemas que existen en Oviedo". No en vano, "los baches no son ni mucho menos el único efecto negativo de la dejadez del Ayuntamiento", señala Gonzalo Otero. En su opinión, "en muchas calles del centro y del resto de la ciudad hay muy poca limpieza, un nulo mantenimiento de los equipamientos públicos y muy poca atención a los vecinos que acuden a los responsables municipales con sus problemas".

El representante de la Asociación de Vecinos "Longoria Carbajal" es consciente de que la situación económica en Oviedo "no es boyante", pero considera que el esfuerzo del Ayuntamiento tiene que ser mayor. "Ya no pedimos que se hagan grandes obras porque todos sabemos que ahora las cosas no están del todo bien, pero no es normal que ni siquiera se lleve a cabo un mínimo mantenimiento de lo que ya tenemos". Gonzalo Otero recuerda, por poner un ejemplo, que "Oviedo siempre ha destacado por su limpieza" y que "hay muchos turistas que vienen a la ciudad atraídos por aspectos como ese". La "actitud" del Consistorio, según el representante vecinal, "va a servir para echar a muchas de esas personas y para obligarlos a que vayan a otras ciudades cuando visitan Asturias".

Otro de los problemas que sufren los vecinos del centro de Oviedo -aunque existen quejas al respecto en toda la ciudad- está relacionado con los perros y con los dueños "incívicos", explica Gonzalo Otero. "Cada vez hay más excrementos de animales en la vía pública y nadie hace nada. Entendemos que al Ayuntamiento le resulte imposible controlar a todos aquellos duendes que no cumplen con su labor de ciudadanos, pero serían necesarios más controles y sanciones para que la gente se lo pensase dos veces a la hora de no recoger los excrementos de sus animales". Además, "también hay muchas personas que llevan a los perros sueltos a pesar de que no está permitido, algo que supone un peligro para el resto de vecinos", subraya el presidente de la Asociación de Vecinos "Longoria Carbajal".

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