El equipo de gobierno "lamenta profundamente la falta de confianza que el grupo municipal de Ciudadanos demuestra en el trabajo de los funcionarios municipales al insinuar que pueda existir un amaño" en la adjudicación de un contrato. El tripartito ha tardado menos de 24 horas en replicar a Luis Zaragoza, concejal de Ciudadanos, sobre las irregularidades que este edil detectó en el informe de valoración de las ofertas para hacerse con el servicio de conservación y mantenimiento de las redes semafóricas y de explotación del centro de control de tráfico, y que, a su juicio, benefician a una empresa. En concreto, destaca "la positiva valoración a la incorporación innecesaria de una trabajadora a ese centro de control".
A través de un comunicado, el gobierno municipal defiende "el buen hacer de los trabajadores municipales, su profesionalidad y su respeto escrupuloso a la ley" y califica de "un juego de suspicacias intolerable" las afirmaciones de Ciudadanos porque "una acusación de tal gravedad exige tener pruebas fehacientes". Además, añade que "si el señor Zaragoza las tiene no debería dejar pasar 24 horas sin acudir al juzgado y no preocuparse por salir en los medios de comunicación".
El edil de Ciudadanos contestó ayer casi a la misma velocidad que el equipo de gobierno al insistir en que su grupo no tiene voto en la mesa de contratación y que "quienes decidieron paralizar el proceso por unanimidad ante las irregularidades denunciadas allí por Ciudadanos -que aunque no tiene voto, sí tiene voz- fueron los propios concejales de Gobierno". Y va más allá al retar al tripartito a que si está tan seguro de que no existen anomalías, "adjudique el contrato a esta empresa y asuma la responsabilidad de sus decisiones". Zaragoza remata su contestación al aseverar que "aunque Ciudadanos no ha acusado a nadie de manera directa", es evidente que todos los errores que hemos detectado benefician siempre a la misma empresa".
