Una tonelada de costillas y una exhibición en la que tomaron parte 10 bueyes pusieron el punto y final en la falda del Monte Naranco a la 67.ª edición de las fiestas de San Antonio.
Los vecinos de Fitoria y Villamejil echaron ayer a medianoche el cierre a cuatro días de folixa que comenzaron el viernes pasado con el pregón a cargo de Xune Elipe, fundador y cantante del grupo "Dixebra" y que prosiguieron con numerosas actividades en el "prao" de la fiesta, entre los que destacó la tradicional paellada en la que se sirvieron 1600 raciones.
La clausura de las fiestas de este año comenzó a las 18 horas con el reparto del bollo y el vino, que en esta edición fueron entregados a 1.900 personas a lo largo de la tarde. Una cifra similar a la de años anteriores. "Entregamos unos bollos de grandes dimensiones, pero eso no hace que pierdan calidad", señalaba orgulloso Joaquín Ruiz, presidente de la comisión de festejos.
Con el paso de la tarde, la carpa de las fiestas empezaba a llenarse de visitantes dispuestos a degustar, no solo de los bollos y el vino, sino también de una parrillada elaborada con 1.000 kilos de costillas regadas con sidra.
Mientras los niños y las niñas saltaban en los hinchables, los padres se deleitaban con el ambiente folklórico amenizado por las gaitas, a la espera de las actividades previstas para el cierre de la jornada.
Las fiestas de este año han mantenido un número de asistentes similar al de ediciones anteriores algo que, en opinión de Joaquín García, "es todo un éxito, porque la climatología no jugó de nuestra parte".
Y es que, al igual que sucediera a largo de los días que ha durado la festividad, la fina lluvia de verano amenazó durante la jornada con "aguar la fiesta" a los presentes pero, finalmente, la música y el baile pudieron endulzar la velada con la actuación de los alumnos de la Escuela de Música Tradicional y la celebración de un festival folclórico en el que tomaron parte el grupo de baile Ventolín, de Pola de Siero, y el tradicional de Fitoria.
Posteriormente, los animales tomaron protagonismo con la celebración de la segunda exhibición de arrastre de piedra por bueyes, un evento en el que participaron cinco parejas de bovinos de otras tantas ganaderías y que aspira a convertirse en todo un clásico con el paso de los años en el "prau" de la fiesta de Fitoria.
Doble cita musical
Para la llegada de la noche estaba prevista la actuación musical de las orquestas "Versión Original" y "Anaconda" como colofón para que los asistentes disfruten de sus últimos bailes y para poner fin a cuatro días de intensa verbena, antes de la celebración del sorteo del XVIII Concurso "El Saltador de Fitoria" y de los fuegos artificiales.
Las fiestas de Fitoria y Villamejil cierran el telón en una desapacible noche de la primera semana del mes de julio. Los vecinos de la zona ya restan los días para que la falda del Monte Naranco vuelva a acoger una festividad, la de San Antonio, que forma parte de los eventos festivos veraniegos más tradicionales del municipio de Oviedo.
