Los trabajadores municipales recibirán clase de lengua de signos. Al menos, eso se desprende de la declaración institucional que hizo ayer el Ayuntamiento de Oviedo con el acuerdo de todos los grupos políticos durante el Pleno para destacar "el valor de las lenguas de Signos Españolas en el ejercicio de los derechos, deberes y libertades de las personas sordas y sordociegas como garante de su participación igualitaria en la vida democrática". Así, el texto de la declaración establece que "el Ayuntamiento se compromete a promover medidas complementarias como la formación de personal municipal en el lenguaje de signos para mejorar la atención ciudadana y hacerla más inclusiva". Firman la declaración Ana Rivas (PSOE), Ana Taboada (Somos), Cristina Pontón (IU), Gerardo Antuña (PP) y Luis Zaragoza (Ciudadanos),

En la actualidad, en España conviven dos lenguas de signos, la española y la catalana en la Comunidad Autónoma de Cataluña, tal y como reconoce la Ley 27/2007, de 23 de octubre, por la que se reconocen las lenguas de signos españolas y se regulan los medios de apoyo a la comunicación oral de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas.

El Pleno aprobó por unanimidad la adhesión de Oviedo a la red española de municipios de acogida de refugiados creada por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), con la que se persigue impulsar una intervención organizada desde las instituciones más cercanas a los ciudadanos, como son los ayuntamientos, para la acogida de las personas que buscan asilo en Europa. El municipio ha desarrollado varias medidas en favor de los refugiados como la entrega de 15.000 euros para la población palestina en Siria, otros 15.000 euros para refugiados en Jordania, y 18.000 euros más para que la ONG "Brazos Abiertos" pueda trabajar en la costa griega. Además, el Ayuntamiento estudia integrarse en el Protocolo Municipal de Acogida e Integración de Refugiados que está desarrollando la FEMP.

Los Plenos municipales se celebrarán una hora antes, es decir, el primer martes de cada mes a las 17 horas en lugar de a las 18 horas como hasta el momento. Así lo aprobó ayer la corporación con la abstención del PP.