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Cocina en casa | Isolina Alonso Balán

"En Navidad el postre que se comía en mi pueblo, en Lloréu, era el escaldao"

"A mí de pequeña lo que más me gustaba comer era un buen pedazo de pan de escanda untado de mantequilla y con azúcar por encima"

Isolina Alonso Balán es una mujer vitalista y con gran sentido del humor. Habla con cariño de su pueblo, Lloreo, de sus raíces y de Grado, donde vive actualmente. Una estupenda cocinera, a decir de quienes prueban lo que con tanto cariño hace en su cocina, le gusta compartir recetas olvidadas y recuperar del pasado algunas que, en su opinión, son una auténtica joya. Tal es el caso de la que ofrece hoy aquí, "el escaldao" o, como ella matiza, "lo que era el postre de Navidad de los pobres, cuando ni había turrones y cosas similares, ni dinero para comprarlo. Se preparaba para Nochebuena y Navidad y se comía con leche, porque está mucho más rico", afirma. Mirando hacia atrás también recuerda que en su infancia lo que más le gustaba era "un pedazo de pan de escanda untado de mantequilla y con azúcar por encima".

Desde que se casó, a los 19 años, reparte su vida entre Rubiano, el pueblo de su marido y sus suegros; Lloreu, el suyo y de sus padres, y Grado, donde vive hace ya un tiempo. Eso si, recuerda con cariño el tiempo que vivieron en Arenas de Cabrales. "Cabrales es una tierra maravillosa, recuerdo aquellos días como unos de los más felices, lo pasamos muy bien allí. Luego vivimos también en Rubiano pero cuando nuestros dos hijos, Alejandro y Raúl, llegaron a la edad escolar ya nos planteamos venir a vivir a Grado pues en Rubiano no había escuela", recuerda ella mientras va desmigando en su cocina y con paciencia la boroña, uno de los ingredientes esenciales del escaldao.

Desde muy joven siempre trabajó y así lo señala ella. " Estudié y saqué el título de auxiliar de enfermería. Trabajé en Salas en el ayuntamiento como operaria de servicios y más tarde oposité para una plaza similar en el instituto de Grado y la saqué. Allí estuve cuatro años. Por ese tiempo también me preparé y oposité para una plaza en la residencia de ancianos, plaza que también saqué y que ocupo en la actualidad".

Isolina Alonso es una mujer muy activa que le sabe sacar partido a su tiempo libre. Así afirma que lo que más le gusta "es estar con mi nietina, que es la más guapa de Grado, escríbelo ahí", dice sonriendo, y también disfruta mucho con la lectura "en su rincón favorito de casa, en el sofá del salón; caminar mucho, hacer ganchillo, ir a yoga, ir al mercado y sobre todo disfrutar de reuniones familiares y con amigos, esos son los momentos que más aprecio", matiza.

Para Grado y quien lo habita no tiene más que buenas palabras. Así destaca que "de Grado me gusta todo a excepción de algunas casas que están en mal estado por el centro y que debieron ser guapísimas en su época. Por lo demás yo estoy encantada de vivir en Grado, aquí hay buena gente, hay mucho ambiente y tienes de todo. Aquí puedo tener un vida tranquila y estoy, a la vez, en un punto intermedio entre lo rural y lo urbano".

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