Asturias cerró 2015 con un total de 3.279 casos de varicela, una cifra que en lo que va de este año, desde enero hasta el pasado 19 de junio, ya se ha superado ampliamente, con 5.287 infectados, un 61,2 por ciento más. A estas alturas del año, en 2015, el número de personas que había contraído la varicela en Asturias era de 1.869, así que en 2016 la cifra prácticamente se ha triplicado -se ha multiplicado exactamente por 2,8-. Este aumento de casos es especialmente agudo en el área de Oviedo.

Esos son los datos que maneja el Servicio de Vigilancia Epidemiológica de la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad del Principado, que hace un seguimiento semanal de los casos de varicela y de otras enfermedades de declaración obligada, entre las que está la gripe, el sarampión, la rubéola, las hepatitis y las de carácter venéreo.

Con el número de casos registrados este año, del que solo han transcurrido seis meses, Asturias rompe con una tendencia a la baja en el contagio que los médicos relacionan con la retirada de las farmacias de la vacuna de la varicela durante varios meses.

La última semana de la que la Consejería de Sanidad ha publicado los registros, la del 13 al 19 de julio, se detectaron en Asturias 280 casos de varicela. La anterior fueron 337, y en las precedentes 295, 398, 330 y 261. Solo en enero el número de personas contagiadas bajó del centenar.

Para encontrar cifras similares a las de este año sobre el contagio de la varicela hay que remontarse a 2008. En 2014 la tasa de incidencia de la enfermedad en Asturias era de 291 casos por cada cien mil habitantes, inferior a la que se había registrado en España en el mismo periodo y que llegaba a los 346 casos.

La inclusión de la varicela en el calendario de vacunación del Principado, desde el pasado abril, promete controlar mejor la propagación del virus pero no la erradicación de la enfermedad.

En el año 2014, según los datos de la Consejería de Sanidad, se contabilizaron en la región 3.086 infectados, en 2013 fueron 3.361, en 2012 sumaron 4.879, en 2011 los enfermos de varicela habían sido 4.676. En 2010 los contagiados por el virus fueron 4.172.

En 2009 se registraron 5.578 casos, en 2008 subieron a 6.935, en 2007 fueron 5.146, en 2006 la cifra de afectados había sido mayor hasta 6.806, y en los años anteriores también había superado los 6.000 casos: en 2005 fueron 6.311 y el año anterior 6.021.

Hace diez años, en 2006, la varicela contagió a 6.806 personas, más del doble de las que la padecieron en 2015.

Las cifras de afectados por el virus no varían excesivamente de unos años a otros. Los médicos afirman que la evolución normal de la enfermedad es por brotes y que lo corriente es que se intensifiquen cada tres años.

A finales del pasado mes de mayo, Asturias ya registraba el triple de casos de varicela de los que, a la misma altura, había contabilizado el año pasado. El aumento más notable se había producido en el área sanitaria de Oviedo, con 1.008 enfermos. La capital asturiana está a la cabeza de la región en número de casos y muy por encima de su media de los últimos cinco años.