"Los padres nos comentan que no quieren irse a casa", afirmaba entusiasmada Conchita Pedregal, la coordinadora del campamento de verano municipal en el colegio Veneranda Manzano. Los niños corretean por el patio, juegan con los aros, sonríen, derrochan energía e ilusión. Se muestran encantados con las actividades temáticas organizadas por los monitores, en las que aprenden a la vez que disfrutan. "Esta semana los talleres y juegos para los niños de primaria tratan sobre el reciclaje y el cuidado del medioambiente; para los de Educación Infantil consisten en un viaje alrededor del mundo con dos personajes ficticios 'Xana' y 'Enol'", explica Noelia Otero, rodeada de chiquillos convertidos por una semana en pequeños ecologistas.
"Además, estos campamentos facilitan la conciliación de la vida laboral y familiar", comenta Conchita Pedregal. "Ese es uno de lo los aspectos fundamentales de estos campamentos, los niños combaten el aburrimiento veraniego, y los padres pueden atender sus otras responsabilidades", añade la responsable del centro. Durante el rato de juego libre los más pequeños se acercan al fotógrafo. "¿En qué periódico sale?". Las edades oscilan entre los 3 y los 12 años, y proceden de diversos colegios de la capital del Principado. Víctor Fernández, un niño de cuatro años explica cómo se siente en el campamento. "Lo paso genial, me gusta mucho jugar al 'pilla pilla' con los otros niños". Las palabras de los más pequeños destilan ilusión e inocencia, como en el caso de Dylan Alonso, que ataviado con la equipación del Real Oviedo asegura que le encanta el fútbol. "Soy muy aficionado al Oviedo. De mayor quiero ser futbolista para ser famoso".
En el Veneranda Manzano hay este verano varios niños con necesidades especiales, que corren desbocados por los pasillos, ante la atenta mirada de los monitores. Se muestran completamente integrados con el resto de compañeros. "Normalmente están con el grupo lo máximo posible, realizan las mismas actividades, juegos y talleres que los demás, eso sí, atendidos en todo momento de forma personalizada por una monitora", matiza Conchita Pedregal. El grupo de monitores se muestra totalmente coordinado e ilusionado con su trabajo. "Tenemos alrededor de 70 niños, todos se portan genial y ademas contamos con un grupo profesional integrado por cinco monitoras muy cualificadas, la mayoría han estudiado magisterio, y otras son monitoras de tiempo libre", afirmaba Conchita Pedregal mientras organiza uno de los juegos en el patio.
"Cada semana entran niños nuevos, sobre todo en esta última, esto obliga a comenzar con una presentación cada lunes, que suele consistir en juegos para que aprendan sus nombres. El resto de días empezamos con los saludos, posteriormente continuamos con los talleres, la merienda y el juego libre. Para finalizar realizamos los juegos en el patio, que varían según la temática de cada semana, y en los que separamos a niños de infantil y primaria" explicaba Noelia Otero respecto a la organización que siguen durante la jornada.
Los campamentos de verano en los colegios de la ciudad forman parte de las actividades estivales planificadas por el Ayuntamiento de Oviedo. Las actividades están programadas en siete colegios de la ciudad y se realizan a diario, desde la 9 de la mañana, con servicio de desayuno temprano para quienes lo soliciten. Está previsto que continúen durante el mes de agosto, aunque la demanda es menor.
