Un joven interno en el centro penal de menores de Sograndio se fugó el viernes, hacia las 13 horas, al saltar la valla perimetral del recinto cuando lo trasladaban con otro compañero desde el taller de mecánica hasta una habitación del primer piso. Los vigilantes de seguridad lograron interceptar al segundo chico, que también intentó escapar. Ambos jóvenes cumplían una pena de tres años "por apuñalamiento" y estaban alojados en régimen cerrado.

Al cierre de esta edición, aún no se había localizado al fugado, considerado como uno de los más conflictivos de las instalaciones de Sograndio y que estaba alojado en una celda de aislamiento.

La Asociación de Vigilantes de Seguridad Privada de Asturias (Avispa) exige la dimisión inmediata del director del centro de menores porque "es incapaz de conseguir los fines y objetivos que se le debe exigir, que no son otros que la rehabilitación social de los internos, garantizando a su vez la seguridad de los trabajadores y resto de personal".

Además, la asociación denuncia la que a su juicio es "una gestión negligente" por parte de los responsables de la empresa de Seguridad Alcor, encargada de la vigilancia del centro penal de menores donde ha habido varias fugas en los dos últimos años y exigen la implantación de medidas correctoras "al objeto de evitar la repetición continua y reiterada de altercados y fugas, agravado por la falta de Protocolos Internos por escrito donde se especifiquen las funciones de los operativos de seguridad, sumado todo ello a la escasez de personal y la falta de medios y recursos para ejercer su labor".