La ciudad de Oviedo perderá en un "futuro próximo" los títulos de "invicta" y "heroica", que ostenta desde que el 25 de marzo de 1938 el dictador Francisco Franco se los sumara a los que ya tenía: "muy noble, muy leal, benemérita y buena ciudad". La retirada de "invicta" y "heroica" del escudo ovetense fue uno de los temas más tratados durante estos meses en las reuniones de la mesa de trabajo de la Memoria Histórica. Hubo debate entre unos y otros y, al final, el Alcalde, Wenceslao López, resolvió dejar la retirada de estos títulos para "un futuro próximo".
Así consta en los distintos documentos sobre la mesa de trabajo de la Memoria Histórica a los que ha tenido acceso este periódico. En ellos se advierten los diversos posicionamientos de los participantes con relación a un asunto planteado en su día por Somos. Así, la representante de la Universidad, Carmen García, señala que es partidaria de quitar estos títulos porque fueron añadidos por Franco. La archivera municipal, Ana Herrero, matiza que Franco le dio permiso a Oviedo para incluir o no esos títulos en el escudo y asegura que para iniciar el procedimiento de retirada de los títulos, sería conveniente pedir un informe a la Real Academia de Historia. Hay miembros de la mesa de trabajo que restan importancia a esta cuestión concreta. Por ejemplo Adolfo Fernández, de la Fundación José Barreiro, que considera que los vecinos ovetenses ya no asocian esos títulos con el franquismo. García advierte, no obstante, que el proceso acarrearía "más problemas" que cambiar nombres de calles de la ciudad.
La aplicación de la Ley de Memoria Histórica es un punto incluido en el acuerdo de investidura consensuado por los tres socios del gobierno (Somos, PSOE e IU). La competencia depende directamente de Alcaldía después de que, en los primeros meses de gobierno tripartito, IU y Somos se pelearan entre ellos para tenerla en alguna de sus concejalías. El año pasado, en agosto, la líder de Somos, Ana Taboada, se reunió en solitario y sin avisar con varias asociaciones, lo que molestó a IU. El Alcalde calmó la situación asumiendo la competencia.
