Más de 150 obras presentadas, 25 finalistas y premios por valor de 1.200 euros. Éstos son los números de la novena edición del certamen fotográfico "Huella Astur" que organiza la cadena de sidrerías Tierra Astur.

El primer premio, dotado con 700 euros, fue a parar a manos de Salvador Morales Cogorro. Bajo el título "La luz de guía", la imagen captada por Morales Cogorro en San Juan de Nieva refleja la importancia y la tradición de los faros del litoral cantábrico. Ignacio Pulido Gómez, con su obra titulada "A la hierba", se alzó con el segundo puesto, por el que se llevó 300 euros. La imagen representa una escena del campo asturiano, en la que se observa el particular rito de la recogida de hierba para alimentar al ganado con los pastos de los montes astures, conocidos como brañas. El bronce, con un premio en metálico de 200 euros, recayó en otra escena ubicada en el mundo marítimo, tomada en Puerto de Vega por Alejandro Ramírez Álvarez. En este caso, su fotografía, titulada "Pintando el barco", captura un momento de la dura vida marinera, dotándolo de un atractivo componente estético por su intenso colorido.

La entrega estuvo acompañada de una espicha, amenizada por la actuación del grupo "Pequeño Club Imposible", que suele tocar cada semana en la sidrería que la cadena hostelera tiene en el polígono Águila del Nora. Las imágenes comenzarán ahora una gira por todas las sidrerías de la cadena asturiana, que durará aproximadamente un año. Su destino final será una subasta pública, cuya recaudación irá dirigida en su totalidad a una causa benéfica. Los fondos obtenidos en la pasada edición del certamen fueron donados al Banco de Alimentos de Asturias en una espicha solidaria que se organizó en el local de Colloto. El concurso, que lleva celebrándose cada año desde 2007, tiene por objeto la representación de la esencia de la cultura tradicional asturiana y cuenta con un jurado formado por profesionales y expertos del mundo de la fotografía.