La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Por tierras de la ruta de la plata: pola de lena-puente de los fierros (6)

El Prerrománico sale al encuentro

El itinerario parte de la estación de ferrocarril lenense y conduce hasta joyas como Santa Cristina l En Llanos de Somerón se vislumbra el final

Paisaje desde un alto.

La etapa que une Pola de Lena y Puente de los Fierros comienza en la estación del FEVE de Pola de Lena. Nos dirigimos hacia el Ayuntamiento, donde enlazamos con la antigua carretera a Pajares. Seguimos por ella en dirección a Campomanes hasta que nos encontramos con un puente a la izquierda. Por el cruzamos la autovía a cuya salida giramos a la derecha, pasando junto al Mercado de ganados. Seguimos por la carretera paralelos a la autovía pasando junto al campo de fútbol. Continuamos en clara dirección sur hasta llegar a Vega del Ciego. Aquí giramos a la izquierda pasando por una pasarela metálica por encima del río Pajares. Al salir giramos a la derecha, continuando por la carretera que no lleva hasta la estación del FEVE de la Cobertoria.

De Santa Cristina a Palacio. Al llegar seguimos por el camino de abajo, que pronto da un giro a la izquierda, ascendiendo bajo la cubierta de los arboles hasta que llegamos a la iglesia prerrománica de Santa Cristina de Lena, donde la parada es obligatoria. En caso de querer visitarla, deberemos descender por el camino que sale a su derecha y en la primera casa que nos encontramos pediremos que nos abran. La ruta continua por el camino que nos conduce a la carretera que se dirige a la localidad de Palacio. Una vez en ella, y antes de entrar debemos coger la carretera que se dirige a Alceo, llegando junto a la ermita de la Inmaculada.

Aquí seguimos por el camino que la deja a la izquierda desde donde tenemos una excelente vista de Santa Cristina de Lena y del valle hacia Pola de Lena. El camino va encajonado entre los muros de piedra de los prados y bajo la sombra proporcionada por los arboles a ambos lados del mismo. Pasamos por la zona de prados de Tarrosa, llegando a la localidad de Corneyana, desde donde atravesamos las vías del tren para dirigirnos a la estación. Desde aquí continuamos por la carretera hasta llegar a Campomanes, donde la ruta gira a la izquierda cruzando la carretera N- 630.

Nada mas cruzarla giramos a la izquierda para continuar pegados a la nacional durante escasos metros, hasta encontrar la primera calle a la derecha, en cuya esquina existe un bar, donde giramos a la derecha hasta llegar a la antigua carretera.

Al llegar a ella se gira a la izquierda e ignorando la primera desviación que nos sale a la derecha, debiendo abandonarla, poco después, por el camino que sale a la derecha y, en cuya esquina existe una casa de dos pisos con la parte baja totalmente recubierta de losas de piedra.

La vía jacobea entre prados y bosques. Ascendemos por el camino carretero entre los árboles. La subida es bastante fuerte durante unos cuatrocientos metros aproximadamente, donde nos encontramos con un mojón del camino de Santiago, debiéndolo seguir hasta Herías. Aquí giramos a la derecha, para unos 100 metros después torcer a la izquierda y salir a una zona de prados. Volvemos a internarnos en el bosque y vamos a dar a las praderas donde vemos Herías al fondo.

La localidad debe su nombre a las antiguas tierras de labor, divididos en parcelas, cercadas y acotadas durante ciertos periodos del año para la siembra de la escanda, que pertenecían a distintos propietarios. El pueblo se encuentra en un falso llano a media ladera, entre el valle del Huerna y el de Pajares.

En el centro del pueblo existen dos caserones La Casa'l Mayorezu; y La Casa Donato:, con escudo la primera; con un buen horro, la segunda, así como la iglesia de San Claudio, que posee un bonito retablo y en cuyo pórtico esta grabada la fecha de 1.175, y de la que se cita en un documento del siglo X. Aquí me contaron los vecinos una historia de otro tiempo. Si nos acercamos al medio del pueblo vemos una casa que tiene un muro de hormigón delante y que le tapa totalmente la visión. Según el reato, los dos propietarios de las casas, no debían llevarse muy bien, ya que tenían ideas políticas diferentes.

Un muro con trasfondo político. El propietario de la casa era republicano y el del muro franquista. Después de la victoria de los sublevados el vecino propietario de la finca donde se asienta el muro lo levantó para impedir la visión al republicano propietario de la casa.

Atravesamos el pueblo en dirección al cementerio, por un camino de hormigón, que pronto pasa a tierra. Seguimos siempre por el camino mas llano y llegamos a San Miguel de Eros (o Heros), con una casa abandonada, dos cuadras y la capilla de San Miguel. Continuamos por el camino de Santiago desde donde tenemos una excepcional vista del Valle y del Cordal de la Carisa al fondo. La ruta continua prácticamente en llano hasta Fresnedo, donde podemos descender a la carretera general o bien atravesarlo, para seguir durante un corto trecho por el camino que lleva a la carretera que asciende a los Llanos de Somerón, donde giramos para llegar a a la estación de Puente de los Fierros.

Compartir el artículo

stats