Seis detenidos y tres heridos, uno de ellos en estado crítico, es el balance de una multitudinaria reyerta entre pandillas latinas a las cinco y media de la madrugada de ayer sábado en el casco Antiguo. La pelea, con armas blancas de por medio, tuvo lugar en el entorno de un bar de copas de ambiente latino en la calle Jesús. Según ha podido saber este periódico en medios policiales, las primeras hipótesis de la investigación apuntan a un enfrentamiento entre dos grupos de jóvenes sudamericanos (alguno de ellos menores de edad) que son rivales. Al parecer, unos son de origen ecuatoriano y otros de origen dominicano, aunque la mayoría tienen también la nacionalidad española, al ser hijos de inmigrantes.

El herido más grave, con iniciales W. I. S. G., de 26 años de edad, permanecía al cierre de esta edición en la uvi del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) bajo custodia policial, porque, hasta que se esclarezcan los hechos, también está detenido. Fue intervenido quirúrgicamente de urgencia a las ocho de la mañana y su pronóstico es muy grave. Según ha trascendido, recibió una puñalada en el tórax, otra más en el abdomen que está afectando al hígado, mientras que una tercera puñalada, la más leve, le alcanzó en una pierna. Otros dos heridos en la multitudinaria pelea (uno de ellos el menor de edad, A. V. V. G., de 17 años) fueron dados de alta a lo largo de la mañana y trasladados a los calabozos de la comisaría de la Jefatura Superior de Policía en la calle General Yagüe.

Los cuatro detenidos en Comisaría (al margen del menor de edad y del joven hospitalizado) responden a las siguientes iniciales: R. P. G. S. (30), B. F. G. S. (28), B. A. S. D. (21) y J. B. P. R. (23). Tras prestar declaración en Comisaría serán puestos a disposición de la autoridad judicial de guardia. Entre tanto, los investigadores de la Policía Nacional asignados al caso investigan al portero del mismo bar de copas de ambiente latino en el que se originó la pelea como presunto autor de las tres puñaladas que mantienen al joven ecuatoriano de 26 años debatiéndose entre la vida y la muerte.

Ayer por la mañana se vivieron momentos de tensión en el Hospital cuando esta persona fue trasladada por la Policía Nacional desde los calabozos al complejo sanitario para ser curado de varias heridas y contusiones que presentaba. En ese momento se encontraban en el centro hospitalario familiares del menor de edad (con la nariz rota y un traumatismo craneal), además de los familiares del herido grave. Sin embargo, la fuerte presencia policial en el HUCA evitó que se produjese un enfrentamiento entre las partes implicadas en el conflicto. No obstante, la orden de vigilancia policial en el Hospital es permanente, de manera que una patrulla de la Policía Local continuará en el recinto de La Cadellada mientras el apuñalado grave continúe ingresado.

Entre tanto, en la calle Jesús, donde tuvo lugar la pelea, pocos fueron los vecinos que se percataron del suceso. "El local cambió de dueños y ahora no siempre está abierto. Pero cuando abre, lo hace tarde, más allá de las doce. Esta noche no escuché nada porque salí y cuando llegué a casa a las seis ya estaba cerrado, pero suele haber jaleo", explicó una vecina a este periódico. Una comerciante de la zona señaló que la situación había mejorado desde la intensificación de la vigilancia policial en la zona, a raíz de varias peleas con armas blancas hace unos meses. "Pero está visto que volvemos a las andadas", manifestó.