La concejala de Somos en el Ayuntamiento de Oviedo, Isabel Bermejo, salió ayer al paso de las declaraciones de la presidenta del PP de Asturias, Mercedes Fernández, en las que respaldaba la continuidad en Oviedo del portavoz de su partido, el exalcalde Agustín Iglesias Caunedo, imputado por la trama del agua, a pesar del acuerdo de investidura firmado con Ciudadanos comprometiéndose a apartar de la vida pública a todos los imputados en casos de corrupción.

"Las declaraciones de la presidenta del PP asturiano muestran hasta qué punto los populares tienen integradas y aceptadas determinadas conductas que en cualquier otro país llevarían, por decencia democrática, a la inmediata dimisión o expulsión de la vida pública", manifestó ayer Isabel Bermejo. "Fernández se escuda en que el pacto con Ciudadanos sólo afecta al ámbito nacional y a las Cortes Generales, aceptando tácitamente que en el caso de llegar a la Administración regional y local su aplicación dejaría descabezados y sin representación a numerosos ayuntamientos y comunidades autónomas. Sólo así se entiende ese doble rasero, que lo que vale para España no vale en Oviedo", añadió la concejala de Somos en un comunicado.

Así, en opinión de Bermejo "la líder de los conservadores acepta y respalda que el máximo representante de su partido en la capital sea una persona que está siendo investigada por un Juzgado de Lugo por, supuestamente, hacer varios viajes (algunos con sórdidas fiestas incluidas) pagados por una empresa que era contratista del Ayuntamiento, cuando era concejal de Economía".

También criticó que en la práctica no se materialice "la firma de un pacto supuestamente para renovar la vida política y extirpar el tumor de la corrupción y dejar fuera de él a dos de las tres administraciones muestra hasta qué punto es imposible la cura". En el mismo comunicado la edil de Somos también reprochó al "cirujano" del pacto, Ciudadanos que le haya "temblado la mano porque el paciente, el PP, está tan invadido que sería imposible mantenerle con vida", dijo.

"Con ese panorama general, la situación procesal y ética de Iglesias Caunedo les debe de parecer a todos 'pecata' minuta. A nosotros, que creemos en la limpieza de la vida pública, nos llena de sonrojo", concluyó.