"Muchos vecinos me comentaban su costumbre de viajar a Fonsagrada (Lugo) para disfrutar de un buen pulpo. Ahora, con el pulpeiro que hemos traído, un pedazo de Galicia se ha colado en Teatinos". El hostelero Marcos Álvarez, que colabora con la Asociación de Vecinos "Paulino Vicente" -del Campo de los Reyes y Teatinos- en la organización de los festejos del barrio ovetense, tenía clara cuál sería la clave para "animar un poco más las fiestas e intentar que se parezcan más a las de otras zonas de Oviedo".

Marcos Álvarez, que regenta una cafetería en el barrio, propuso alargar un poco más la celebración: "Que en vez de durar solamente un día, que solía ser el último lunes de agosto, se prolongase durante todo un fin de semana". De este modo, cabía la posibilidad de instalar varios puestos de artesanía, para convertir la calle Puerto de Pajares en un auténtico mercado medieval al aire libre.

Por otro lado, Álvarez también sugirió traer un pulpeiro de Galicia que pusiera sabor a la celebración. Así fue como llegó a la esquina de las calles Puerto de Pajares y Puerto de Tarna la carpa regentada por José Rodríguez, un pulpeiro lucense llegado directamente desde la localidad de Baralla, situada a unos 50 kilómetros de Fonsagrada. "Solemos movernos de fiesta en fiesta durante el verano", indica Rodríguez mientras echa un vistazo a la cazuela en la que descansan los pulpos, aún con vida. Una vez cocinados, habrán servido para alimentar unas 800 bocas a lo largo de los tres días de fiestas, que hoy tocan a su fin. La especialidad de este gallego es el pulpo con cachelos, "rociado con aceite de oliva, que es lo que da sabor", matiza Rodríguez.

Del buen gusto del plato estrella de estas fiestas dieron fe Carlos González y Carmen Álvarez, vecinos de Teatinos que acudieron en familia a la cita con la gastronomía gallega. "El ribeiro para acompañar el pulpo está exquisito", subraya Carlos González en referencia al tradicional vino de la región vecina.

Por su parte, el mercado medieval atrae estos días no sólo a vecinos del barrio, sino también de otras zonas de Oviedo. Entre ellos, Aurelio Álvarez, llegado de Trubia para "dar un paseo por Teatinos, a sabiendas de que habían instalado puestos artesanos". Uno de esos stands es el regentado por Micheli Pio da Silva, una brasileña afincada en Asturias que ofrece utensilios de cocina de madera, navajas de Taramundi y diversos artículos de bisutería, como pendientes, monederos y bolsos confeccionados en tela por ella misma.

A unos pocos metros, Elena López no daba abasto para atender a los vecinos que, próxima la hora de comer, solicitaban de su puesto un trozo de tarta de queso gallego, de empanada de zamburiñas, de queso o de atún, entre otros sabores; o de pan de trigo artesano. "Son productos artesanos de Galicia que se están vendiendo muy bien", comenta.

Las fiestas de Teatinos se despiden hoy con el reparto del bollo (de 17.00 a 20.00 horas), que será amenizado por la banda de gaitas "Ciudad de Oviedo". A las 18.00 horas, miembros de la Federación Asturiana de Kárate ofrecerán una exhibición de esta disciplina. Asimismo, como es habitual cada año de fiestas en este barrio, se incorporará un dispositivo para recoger alimentos en el marco de la "Operación kilo", con la idea de superar la marca del año pasado. Entonces, se recogieron unos 1.200 kilos.

El mercado medieval y la pulpería continuarán a pleno funcionamiento durante todo el día. "Por la noche aumenta la afluencia de gente. Ayer (por anteayer), la carpa estuvo a rebosar. Mucha gente decidió venir a cenar aquí", aseguró Marcos Álvarez. El sabor de Galicia impregna Teatinos.