Un gran despliegue policial con una decena de coches patrulla alertó a primera hora de la mañana de ayer a los vecinos del entorno de la plaza de la Liberación. El foco de la alarma estaba situado en el interior de un bar de la plaza, que hace esquina con la avenida de Colón. al parecer, una llamada anónima alertó a la centralita del 092 de la Policía Local de que en el bar había un hombre con una pistola.

Dada la gravedad del aviso, se activó el protocolo de emergencia y hasta el lugar se desplazaron numerosas dotaciones de la Policía Local, que a su vez alertaron de lo ocurrido a la Jefatura Superior de Policía Nacional, que también envió varias unidades. Unos y otros se encargaron de acordonar la zona, para garantizar la seguridad de los viandantes, mientras varios agentes accedieron al interior del bar. Según informaron fuentes policiales a este periódico, algunas personas aseguraron que el hombre que portaba el arma era un cliente que ya había abandonado el local.

A pesar de estas afirmaciones, los policías destacados en el lugar registraron a los clientes para cerciorarse e identificaron a algunos de ellos. No apareció ningún arma de fuego. Las mismas fuentes explicaron que no se está buscando al sospechoso de portar la pistola "porque es un hecho que no está confirmado".

La Policía explica que no descartan que algún cliente, molesto por alguna razón con el establecimiento, realizase la llamada anónima solicitando la presencia policial "para fastidiar". No obstante, las mismas fuentes consultadas en medios policiales han explicado que se trata de un bar "altamente conflictivo" en el que se han sucedido numerosos episodios violentos, el último un apuñalamiento con un herido grave el pasado mes de junio. En el ámbito administrativo también pesan sobre él varias sanciones por incumplir la normativa en materia de horarios y ruidos.