A algunos, ayer, todavía les costaba decir sólo la Gesta. "Yo iba a la Gesta II y, claro, me sigue saliendo así. Tendré que acostumbrarme a decir sólo Gesta", comentaba risueño un alumno de primaria. El profesorado y los estudiantes de este colegio público de Oviedo afrontaron ayer su primer día de curso, como el resto de centros educativos de la región, pero con una importante novedad: era su primera jornada como centro unificado, tras las obras de fusión de los dos colegios, Gesta I y II, que se han llevado a cabo durante los meses de verano. "Todo ha ido con normalidad, como cualquier primer día de clase en otro centro. Y lo hemos conseguido gracias a la colaboración de todos los padres, los alumnos y los profesores", aseguró la directora del colegio, Elisa Fernández, que este curso cuenta con cerca de 650 alumnos.
Sin embargo, desde la Asociación de Madres y Padres (AMPA) del extinguido Gesta I aseguran que "los accesos al centro han sido un poco caóticos". "Había carteles en las puertas indicando los grupos que debían entrar por cada una, pero muchos padres y alumnos llegaban confundidos", afirma Isabel Rioyo, presidenta de esta asociación. Además, la entrada se complicó porque los progenitores de los alumnos de infantil, los más pequeños del centro, no pudieron entrar al patio para dejar a sus hijos. "Los profesores iban a recogerlos uno a uno a la puerta, y eso retrasó todo. La calle es estrecha y la gente se fue apelotonando", añadió.
El centro no pudo enviar ninguna directriz previa sobre la entrada porque "al no estar unificadas las webs de los dos colegios, era imposible hacer un envío generalizado", explicó la directora. Algo que a la AMPA le sirve para reafirmarse en su posición. "Seguimos pensando que fue una decisión precipitada. Las obras empezaron más tarde de lo previsto y se acabaron por los pelos. Varios profesores no sabían qué cursos iban a dar y algunos ni se conocían entre ellos. Está todo con alfileres", aseguró Rioyo, quien agregó irónicamente que "echamos mucho de menos" al consejero de Educación, Genaro Alonso, en esta primera jornada lectiva. "Insistió mucho en que la fusión de las dos Gestas era su proyecto estrella, que iba a ser el centro de referencia de Oviedo. Tenía que haber estado hoy aquí".
Pero, tal y como confirman los padres y la dirección, una vez superada la fase de entrada, el día transcurrió con normalidad. "La primera fase de obra que estaba prevista ya se ha completado, sólo quedan algunos pupitres por colocar en su sitio", afirmó Elisa Fernández. La principal novedad es la ampliación del comedor, con espacio para cien comensales más. "Eso nos permite hacer dos turnos y eliminar el intermedio, que tenía que comer corriendo en media hora", precisó. También son novedosas la eliminación del muro que separaba los edificios centrales, conectando los pasillos de la segunda y la tercera planta, y la mejora del hall de entrada y los accesos: "Ya se han sustituido las escaleras de la primera planta por rampas". "Ahora sólo nos queda coger lo mejor de ambos centros", añadió.
A lo que sí afectará la fusión de los colegios será a las actividades extraescolares que organizan los padres. "No tenemos asignados todavía espacios, así que no podremos comenzar hasta el 17 de octubre".
