Cada vez que sale a la palestra Tino Casal se recuerda el "Lamento de gaitas" de la etapa de "Los Archiduques", uno de los grupos por los que pasó el cantante, junto a "Los Zafiros Negros", antes de emprender su carrera en solitario. Bien, pues en la misa que ayer se celebró en la basílica de San Juan el Real, dentro de los numerosos actos previstos con motivo del 25.º aniversario de su muerte, la gaita, tocada en este caso por Javier González, tuvo su parte de protagonismo en los cánticos del "Coro Santiaguín", que dirige Enrique Rodríguez Almanza. El coro cantó la misa en asturiano acompañado por la citada gaita y también con María Casal, sobrina de Tino Casal, a los teclados , que tenía 10 años cuando el artista de Tudela Veguín falleció en accidente de tráfico en Madrid, a los 41 años. Junto a la sobrina del cantante, la familia estaba representada en este apartado musical por Víctor Casal, voz y presidente del coro.

"La misa en bable está escrita por el poeta y escritor langreano José León Delestal para ser interpretada por el "Coro Santiaguín", es una misa donde hay parte para la gaita, también en otras lleva el panderu y el órgano", explica Víctor Casal.

La ceremonia empezó con "La canción de entrada"; con el sonido de la gaita, con una introducción muy sólida. A continuación, sonó el órgano, para dar paso a las voces del coro. "Lo hacemos a cuatro voces", precisó al concluir la misa el presidente del "Coro Santiaguín". La formación, que ha ganado premios de gran prestigio y actuado en grandes festivales, cuenta con 36 componentes, aunque ayer por distintos motivos había unos treinta. Víctor Casal es de la parroquia de San Juan, "igual que Tino Casal, que en Oviedo vivía en la calle la Lila", puntualiza el presidente del coro. Y ésa fue la razón por la que se celebró la eucaristía en San Juan el Real

Y así fue una emotiva misa cantada para seguir recordando al artista en el día que se cumplían 25 años de su muerte. Los actos conmemorativos proseguirán a final de mes en Tudela Veguín.