La canadiense Susan Loraine, de 64 años, no olvidará nunca su primera visita a España. Recién llegada de Madrid a Asturias, en avión, se dirigió a su primer destino para iniciar, junto a su marido James Loraine, el sábado, el Camino Primitivo desde Oviedo a Santiago de Compostela. Esa primera parada era el albergue del Escamplero, en Las Regueras, y no se podía imaginar que allí la estaría esperando un comité de bienvenida para homenajearla por ser la peregrina número 2.000 del año en dicho alojamiento.

"Estaba emocionadísima. Es su primer viaje a España y no se esperaba que le pudiera ocurrir algo así, justo al llegar. Además, no se creía que fuera la alcaldesa en persona a recibirla", afirma Miguel Ángel Suárez, concejal de Cultura de Las Regueras. Él, la concejala de Educación, María Josefa Suárez Llana, y la alcaldesa, Maribel Menéndez, se acercaron al Escamplero para hacerle entrega de un diploma y compartir con ella una animada charla. "Yo tuve que hacer de intérprete, porque no hablaban ni una palabra de español", dice Suárez. Además, el responsable del albergue, Fernando Álvarez, les invitó a todos a sidra y a bollos preñaos. "Les parecía muy curioso que la sidra se tuviera que escanciar. No paraban de preguntar por qué y cómo se hacía". Y, después de observar a Fernando Álvarez, se animó a hacerlo ella. "Al principio lo tiraba todo, pero es normal. También le llamó mucho la atención que la sidra se bebiera de golpe y le daba vergüenza tirar los posos en el suelo", cuenta entre risas el edil de Las Regueras.

La peregrina canadiense, que llegó a Asturias el viernes, explicó que escogieron el Camino Primitivo porque era el más antiguo y es Patrimonio de la Humanidad. "Decía que en Canadá se oía hablar mucho del Camino Francés, pero que el Primitivo estaba cogiendo fuerza". De hecho, este año, el peregrino 2.000 del Escamplero se entregó 12 días antes que en 2015. "Eso demuestra que viene cada vez más gente", apunta Suárez. El año anterior también fue una mujer extranjera, en este caso de nacionalidad mexicana, la que recibió este diploma. "En esta época suelen venir más extranjeros y personas de más de 50. Buscan más tranquilidad, huir de las aglomeraciones del verano y de las altas temperaturas".