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Consuelo González | presidenta del Ovetus Patinaje Club

"El Oviedo rural sigue siendo el gran desconocido para el área urbana"

"Soy ingeniera de minas y, aunque ahora no ejerzo, la carrera me encantó"

Consuelo González, en el exterior del Palacio de los Deportes. l. murias

Consuelo González García, presidenta del Ovetus Patinaje Club, es ovetense, de Brañes y aunque vivió varios años en Lugones (Siero), se siente plenamente de la localidad de la cara norte del Naranco situada en el extremo noroccidental del municipio, que limita con los concejos de Llanera y Las Regueras y con las parroquias ovetenses de Villapérez, Loriana y Lillo. En Brañes habitan apenas 80 personas, entre ellas, Consuelo y su familia. A pesar de depender del coche para casi todo, asegura que no cambiaría su pueblo por residir en el centro de Oviedo. Consuelo González es ingeniera de minas, profesión que no ejerce en la actualidad. En cambio, desarrolla una intensa labor como presidenta del Club de Patinaje Ovetus, con más de sesenta niñas en sus filas y muchos trofeos en el palmarés.

De Brañes a Lugones. "Nací en Brañes en el año 1970. Luego viví muchos años en Lugones, pero nunca me olvidé de mi localidad natal. Los mejores recuerdos de mi infancia están ligados a ese lugar. De pequeña era una buena estudiante, aunque tenía que hincar los codos para sacar las asignaturas. Estudié la EGB en el colegio El Carbayu, de Lugones y después hice BUP en el instituto La Ería, también en Lugones, un lugar al que, por razones obvias, le tengo un cariño especial".

Aterrizaje en la Escuela de Minas. "Cuando tuve que elegir carrera me decanté por Ingeniería de Minas. En mi época ya había muchas mujeres. Me gustó mucho la carrera. Creo que tuve suerte con los compañeros y por supuesto, con los profesores que me dieron clase. Ejercí durante unos años pero pronto dejé de trabajar en el sector".

Dos hijas y el inicio de una afición. "Soy madre de dos niñas, que tienen ya quince y trece años, respectivamente. Me he dedicado mucho a ellas desde que nacieron. La afición por el patinaje me viene precisamente de mis hijas. Empezaron a patinar con siete y cinco años, en el Ovetus Patinaje Club, que celebra su veinte aniversario. Me encanta el patinaje. Y dicho esto, tengo que confesar que nunca he sido capaz de sostenerme sobre unos patines, así que eso hace que admire aún más lo que hacen estas jóvenes deportistas que tenemos en el club".

Una intensa labor al frente del Ovetus. "Mis hijas empezaron con patines en línea en el colegio y les gustó tanto que enseguida se pasaron al patinaje artístico. Recuerdo que un buen día llegue con ellas al Palacio de los Deportes para empezar los entrenamientos y a los tres años, allá por el 2011, estaba en la directiva con un equipo magnífico de padres, muy interesados en participar en el Club y en hacer cosas a favor de un deporte que poco a poco nos enganchó. Detectamos que cada vez hay más afición por el patinaje. A nuestro Club llegan muchas niñas que quieren practicar este deporte. Eso implica también mas problemas y contratiempos. Tenemos a Richar Carbajal y a Paula Naves como entrenadores, y estamos encantados con ellos. A fuerza de ver a mis hijas y al resto de las niñas puedo decir que ya controlo los saltos y las piruetas. A la pequeña, Graciela Barciella González, se le da muy bien, de hecho es la campeona de Asturias Infantil".

En el Palacio, como en casa. "El Palacio de los Deportes es como mi segunda casa. Está muy bien. Nosotros no tenemos queja. Contamos con pistas para entrenar todas las semanas. Tampoco podemos pretender que sea sólo para nosotros. Hay que adaptarse a todas las necesidades. y compartir los recursos. El Ayuntamiento nos trata muy bien. Es verdad que en los últimos años las subvenciones bajaron un poco. Aunque hay mucha afición somos un deporte minoritario y eso que este año hay un boom provocado por una serie de televisión".

Paseos por Uría y el entorno de la Catedral. "Vivo en Brañes pero eso no quiere decir que no me guste pasear por Oviedo. Me encanta recorrer la calle Uría y en general por el centro; también disfruto caminando por los alrededores de la Catedral. Siempre acabas por descubrir algo nuevo".

El encanto del campo . "Brañes es un pueblo muy pequeño pero muy guapo. Fui alcaldesa de barrio durante seis años y a mi me tocó mantener todas las mejoras que se hicieron en los años anteriores, que fueron muchas. Los caminos están asfaltados, se colocó iluminación, se implantó la recogida de basuras y se pusieron contenedores de reciclaje. La zona rural de Oviedo sigue siendo la gran desconocida para la ciudad. Los que vivimos en los pueblos del concejo a a veces nos sentimos un poco apartados".

Atractivos turísticos. "Mucha gente suele venir caminando por Ules hacia Brañes. Otra de las rutas va de Ladines al Naranco, ideal para caballos y quads. Yo soy poco deportista. Ya corro bastante todos los días para recoger a mis hijas y llegar a tiempo a todas partes".

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