Contra la mala fama, excelencia académica. En todos los niveles. ESO, Bachiller y Formación Profesional. Dos alumnos del Instituto Pando han sido galardonados con los premios extraordinarios del curso 2015-16 que otorga la consejería de Educación. Lorcan Quain, hoy estudiante en Gijón de Ingeniería Mecánica, en la modalidad bilingüe, obtuvo el de Bachillerato, y Guillermo Mera el de la ESO. Además, en esta última categoría Juan Valentín Prieto obtuvo un accésit. Y participaron también en la prueba, a la que solo tienen acceso los mejores, Raquel Arrontes y Claudia Fernández. El tíquet de entrada: una nota media igual o superior a 9 y la calificación de sobresaliente en Lengua Castellana, Matemáticas e Inglés.

De ahí el orgullo del centro. Más aún si se tiene en cuenta que el año anterior, el alumno Pedro Palacio había conseguido el premio extraordinario de Formación Profesional de grado superior. "Está claro que el estudiante son la materia prima pero los profesores son la clave", destaca agradecido Pedro Ruiz, quien salió este año para cursar estudios bilingües de Economía en la Universidad de Oviedo. "Muchos profesores llevan aquí muchos años, conocen a la gente. El trato es muy cercano", asegura.

Luciano Rodríguez, quien habla maravillas de sus chicos, llegó en 2002. Es el director del centro y la prueba andante de esta buena relación. Unos alumnos que hacen gimnasia en el patio le saludan. "¡Luciano!", exclaman a gritos con familiaridad. Y él les devuelve el saludo con la mano.

Y aunque durante estos años también ha habido rotaciones en el campo docente, "los profesores nuevos mantienen el nivel". Lo confirma Guillermo Mera, quien lamenta las dificultades que existen para lograr becas de estudios. Y no es la única nota de amargura que aporta a la conversación. Porque todos los alumnos están encantados con el centro pero para la situación actual de la educación tienen palabras muy diferentes. Y para la del futuro laboral que se aproxima, más de lo mismo. Le gustaría cursar estudios en el campo de la biotecnología y cree que "en Asturias mi futuro es muy oscuro. Hay industria pero faltan centros de investigación". Pablo Ruiz le tranquiliza: "El mercado laboral está difícil pero la excelencia no tanto".

El debate, con todos los chicos sentados en una fila de sillas, vuelve a las becas de la mano de Pedro Palacio, quien tras haber realizado con brillantez sus estudio de Formación Profesional en el Pando estudia ahora Comercio y Marketing. "Obtener una beca es muy complicado. Aunque tengas muy buenas notas", lamenta.

Todos están considerando ya la posibilidad de salir de Asturias durante su formación. Incluso al extranjero a través de una beca Erasmus y, dependiendo de su campo, buscarse la vida fuera. Lorcan Quain, por ejemplo, cree que como ingeniero mecánico le iría mejor fuera de Asturias. Pero estaría, como todos, encantado de volver a casa: "Me gustaría poder regresar y montar una empresa de lo que he estudiado".