Veinticuatro alumnos del Instituto de La Ería llevan desde principio de curso sin clase de Inglés. El profesor que se encargaba de impartir estas lecciones a dos grupos de la modalidad bilingüe de 4.º de la ESO se incorporó entonces a la dirección del centro como jefe de estudios y dejó vacante un puesto que aún no se ha cubierto. "Han perdido más de 50 horas lectivas, prácticamente un trimestre", lamentan los padres en un escrito remitido a la Consejería de Educación. Se están movilizando para poner fin a lo que consideran una situación "indignante". Pero aún no han obtenido "ninguna respuesta clara".

La dirección del centro les comunicó el 18 de octubre que desde que tuvo lugar el nombramiento del anterior jefe de estudios han estado tramitando, sin éxito, que se cubra la vacante. Decidieron tomar cartas en el asunto. Llevaron entonces sus reclamaciones al inspector del centro quien el día 28 les remitió finalmente a la Consejería. El pasado lunes pusieron sus reivindicaciones en común y decidieron contactar directamente con Educación. Firmaron y registraron un escrito dirigido a su máximo responsable, Genaro Alonso, y otros altos cargos de su departamento que, consideran, tienen en su mano poner solución a este problema: "Sólo velamos por que nuestros hijos tengan cubiertos sus derechos básicos, en este caso el de tener profesor".

"No nos han dado ni una sola respuesta clara", criticó ayer Mario Prendes, uno de los padres firmantes del escrito en el que se pone de relieve que los alumnos se están quedando atrás en inglés. Los padres quieren que se cubra esa plaza, pero no exigen que llegue un profesor nuevo. Consideran que eso sería lo ideal, pero no son contrarios a otra solución. Esta podría venir de una reorganización de grupos y horarios. Algo que a estas alturas del curso podría suponer un trastorno para todo el personal docente. Si se opta por esta vía, pidieron que se haga "con la mayor celeridad posible". Y recordaron: "Lo que debe primar es el interés del alumnado y el derecho a tener este profesor de forma inmediata".

Hasta el momento, un profesor de guardia se ha hecho cargo de esas horas y los alumnos han analizado textos en inglés y utilizado esas horas para realizar las tareas que les encomiendan en otras asignaturas.