"Las ratas campan a sus anchas. Las vemos por todos lados". La secretaria de la Asociación de Vecinos de San Lázaro y Otero, Cuqui Ormazábal, unió ayer sus barrios a los que por toda la ciudad reclaman al Ayuntamiento de Oviedo que tome medidas para acabar con la presencia de roedores.

"Ya hemos realizado dos peticiones para que se desratice, la primera hace más de dos meses y no nos han hecho ni caso", destacó. Una situación que preocupa a los habitantes de la zona por la que, aseguró, se pasean ratas de un tamaño inusualmente grande. "No sabemos lo que vamos a hacer", incidió Ormazábal con desesperación: "Tendremos que realizar la tercera petición a ver si esta vez resulta efectiva".

La situación tiene intranquilos a todos los vecinos conocedores de la capacidad de estos animales para multiplicarse. "Las ratas proliferan muy y rápido y como no se tomen medidas pronto, van a terminar comiéndonos", recalcó la secretaria de la asociación vecinal.