La reacción de un vecino que llamó rápidamente a los servicios de emergencia evitó una tragedia mayor en el inmueble de la calle Joaquín Blume 1 en Oviedo. Dos trabajadores y otro inquilino que acudió en su auxilio resultaron intoxicados por el monóxido de carbono procedente de una caldera de pellets que estaban revisando. "El primero en intoxicarse fue uno de los operarios después inhalaron el gas su compañero y un vecino que acudió en su ayuda. La rápida actuación de otro vecino que llamó a los servicios de emergencia y el trabajo de los bomeros evitaron que la tragedia fuera mayor", destacó el concejal de seguridad ciudadana, Ricardo Fernánez.

Cuando los bomberos llegaron al lugar de los hechos encontraron a uno de los operarios inconsciente, su estado es el que reviste mayor gravedad. "Ninguno de los tres podía salir de allí", cuenta el bombero Sigfrido Fernández que acudió al lugar de los hechos.

La alta condensación de gases en el almacén de pellets de la caldera obligó a los bomberos a buscar una toma de aire en la calle para poder ventilar el silo y facilitar el acceso de la policía judicial que investiga el suceso