El conductor acusado de llevarse por delante a un repartidor rumano, sobre las cinco de la mañana del 5 de mayo de 2012, en la avenida del Mar, aceptó ayer una condena de sesenta jornadas de trabajos en beneficio de la comunidad por un delito contra la seguridad vial, en concurso con otro de lesiones. La magistrada María Paz González-Tascón condenó además al acusado, que circulaba con una tasa de 270 miligramos de etanol por decilitro de sangre, a la retirada del carné de conducir por espacio de dos años y medio que conlleva la pérdida de vigencia del permiso. La víctima estuvo nueve días en el hospital y tuvo que ser sometido a dos intervenciones.