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Cantante y divulgador musical, presenta su libro "El amor te hará inmortal" esta tarde en Oviedo

Ramón Gener: "Ni hay obligación de ir a la ópera ni se es mejor persona por ello"

"El verbo divulgar es odioso, porque lo único que puedes hacer con lo que sabes es compartirlo"

Ramón Gener. LNE

Ramón Gener debe su popularidad a la televisión, que le ha servido de plataforma de divulgación musical. Él reniega de esa palabra, "divulgación", e insiste en que lo que hace es compartir lo que sabe sobre algo que él ama. Precisamente, de cómo retener lo que se ama trata su nuevo libro, "El amor te hará inmortal", que presenta esta tarde en Oviedo, a las seis de la tarde en la Biblioteca Pública de Asturias.

-El libro empieza con la muerte de su padre.

-Arranca con la segunda muerte de mi padre. Él ya había muerto muchos años antes, con el Alzhéimer. Se olvidó de quiénes éramos, de quién era él, de hablar y de respirar. Ya es complicado morirse una vez, hacerlo dos lo es doblemente. En esa situación, yo invoco a las tres moiras (la personificación del destino para los griegos), que me llevan de viaje por el tiempo y el espacio, viajamos para ver a personas, músicos, que están pasando por un momento fastidiado, como yo. Y mientras estoy con Verdi, Callas o Farinelli, voy averiguando qué hay que hacer con todos esos sentimientos. Y los lectores viajan conmigo.

-Un relato muy personal.

-Yo habló de cosas muy íntimas, porque tengo la impresión de que son más universales, y la muerte es una de las más importantes. Morimos definitivamente cuando nadie nos recuerda, decían los griegos.

-¿Con qué criterio ha seleccionado a los artistas que visita en el libro?

-La historia de la música está llena de personajes interesantes, pero estos son los que más me han acompañado a lo largo de la vida. Verdi pierde a toda su familia y decide aislarse del mundo, hasta que encuentra un puente a la vida. Joaquín Rodrigo en París escribe con el ánimo castigado, por una hija que no pudo tener...

-¿Con cuál se queda?

-Al volver del viaje de Puccini aparece el personaje que lo resuelve todo, que es Aquiles, que sabe cómo hacer para que los que se fueron sean inmortales.

-Fue cantante y ahora se dedica a la divulgación musical.

-Yo decidí dejar de cantar hace unos años y la vida me dio otra oportunidad. El verbo divulgar es odioso, porque quién es nadie para divulgar nada. Lo único que puedes hacer con algo que sabes es compartirlo.

-Dicen que la formación musical en España no es buena y que falla la educación básica.

-En los colegios se estudia literatura española y hay que leer a Márquez, Calderón, Lope? Y eso no significa que los alumnos luego lean. Lo mismo pasaría si en clase se enseña quién es Brahms, Händel? El problema es que tenemos una educación decimonónica, y mientras sea así todo lo que hagamos son esfuerzos en vano. Solo cambiamos el envoltorio de las cosas: qué más da dar clase con internet o sin internet, con tiza o con ordenador? Hay que educar a las personas para lo que van a ser en el siglo XXII. No hay ninguna obligación de ir a la ópera, no eres mejor por ir a la ópera. Se habla de culturizar a la gente como si fuera una misión divina. Pero para hablar de educación necesitaría una tesis.

-¿Está al tanto de la polémica por la supresión de los Premios Líricos de Oviedo?

-Hay que decir que los premios son muy importantes, difunden la cultura, ayudan a poner la ciudad en el mapa...

-Entiendo que es escéptico sobre la utilidad de los premios en general.

-La única persona que tuvo los huevos de rechazar el Nobel fue Sartre. En cuestiones de arte no existe el mejor: no se puede clasificar a la gente.

-¿Y Bob Dylan?

-Bob Dylan ha hecho lo que es propio de su personaje: mantenernos a todos en vilo.

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