¿Son el ácido úrico y la gota factores de riesgo cardiovascular? Ésta será una de las cuestiones que se debatirán mañana y pasado en el marco del VIII Congreso de la Sociedad Asturiana de Hipertensión y Riesgo Vascular (SAHRVA), que se desarrollará en el Colegio de Médicos de Oviedo. En la mesa dedicada al ácido úrico serán analizados los estudios más recientes, una discusión que en la práctica implica dirimir si debe tratarse la hiperuricemia asintomática.

"La gota, una entidad medieval que es consecuencia de la hiperuricemia, se relaciona íntimamente con la insuficiencia renal, la hipertensión y la obesidad, y, de manera evidente, con la alimentación inadecuada, especialmente con el consumo de fructosa, abundante en las bebidas azucaradas", señalan los doctores Francis Fernández Vega y Saúl Suárez, presidente y vicepresidente, respectivamente, de la SAHRVA. "Teniendo en cuenta que los eventos vasculares son la principal causa de muerte del paciente gotoso, el interés clínico de la mesa está asegurado", agregan.

Las jornadas se dirigen a médicos y enfermeros de atención primaria y hospitalaria que se enfrentan en su tarea diaria con el riesgo y la enfermedad cardiovascular. En esta reunión científica, de carácter bienal, la SAHRVA efectúa una revisión de las cuestiones de mayor actualidad clínica en lo que concierne a la hipertensión arterial y el riesgo cardiovascular.

Fármacos antidiabéticos

Las enfermedades cardiovasculares ocupan el primer puesto de las causas de mortalidad en los países avanzados. Asturias no es una excepción. "El 35 por ciento de las muertes que se registran en España se deben a patologías cardiovasculares derivadas del insuficiente conocimiento y control de sus factores de riesgo", indican Saúl Suárez y Francis Fernández Vega. Por ejemplo, precisan, "la hipertensión arterial, que es el factor de riesgo que más contribuye en el mundo a la discapacidad y muerte, sólo se controla en el 50 por ciento de los casos descubiertos y puestos en tratamiento". Pero sucede además que "hasta un 30 por ciento de los afectados ni siquiera lo saben, especialmente personas jóvenes, de 18 a 35 años, en las que la prevalencia alcanza al 10 por ciento".

Las sesiones incluirán un espacio dedicado a discutir "el papel en la práctica clínica de un nuevo grupo de fármacos antidiabéticos, los inhibidores del transportador sodio-glucosa (gliflozinas), que actúan en el riñón y que están suponiendo una original y efectiva herramienta en el tratamiento de la diabetes", destacan los organizadores del evento. Con todo, enfatizan, la "mesa estrella" será la de médicos residentes de último año.