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DANIEL HOPE | Violinista, toca el sábado en el Auditorio

"Contaremos la historia del violín barroco a través de música realmente bella"

"Muchos artistas de pop usan su posición para intentar mejorar el mundo y los de clásica deberíamos imitarlos; Gabriela Montero y Daniel Barenboim ya lo hacen"

Daniel Hope. HARALD HOFFMAN

Daniel Hope (Durban, Sudáfrica, 1973) es uno de los violinistas más reconocidos de la actualidad. Famoso por su compromiso con los más desfavorecidos y con las víctimas de los conflictos bélicos, actuará en el Auditorio Príncipe Felipe el sábado (20 horas) dentro del ciclo Los Conciertos del Auditorio, con el patrocinio de LA NUEVA ESPAÑA. El programa está centrado enteramente en la música para violín del Barroco. Hope reconoce que su relación con Yehudi Menuhin ha marcado su carrera artística, y recuerda con mucho cariño su anterior concierto celebrado en la capital asturiana, en 2013, junto a Vladimir Ashkenazy y la Joven Orquesta de la Unión Europea (EUYO).

-Su último disco está dedicado a Yehudi Menuhin, ¿ qué legado ha dejado en el ámbito musical en general y en su propia carrera artística?

-Su compromiso ha superado el ámbito del violín y de la propia música. Era una persona que se preocupaba por la gente, si estaban enfermos, si tenían acceso a las necesidades básicas? y también era un hombre muy preocupado por la educación de la gente joven. Y para mí es una inspiración, a nivel artístico y humano.

-¿Cómo era su relación?

-Fue muy cercana porque mi madre trabajaba para él, y yo le considero como un abuelo que ha formado parte de mi vida desde que era pequeño. A menudo íbamos a su casa, y más tarde, estuvimos juntos en Suiza. Su pérdida fue muy dura.

-Uno de los discos más vendidos de todos los tiempos, no solo en el ámbito de la clásica, es el álbum que usted publicó sobre Vivaldi, ¿tiene claro el porqué de un éxito tan rotundo?

-He sido desde siempre un amante de la música de Vivaldi, que es un compositor increíble, con una gran aportación al mundo del violín. En este disco quise explorar su música, más allá de "Las cuatro estaciones", y mostrársela a la gente. Queríamos dar una visión distinta de este compositor, y contamos también con la colaboración de la Orquesta de Cámara Europea y de la mezzosoprano Anne Sophie von Otter, que interpretaba un aria estupenda de la ópera "Andrómeda liberata" del propio Vivaldi. Me siento realmente afortunado de haber podido contar con todos estos grandísimos músicos, y creo que el verdadero éxito del disco reside en ello.

-¿Qué podría adelantar del concierto que va a ofrecer aquí en Oviedo?

-Es un viaje a través de la música barroca, desde el final del Renacimiento. Comenzamos con el compositor español Diego Ortiz, que se sitúa justamente en ese periodo. Hemos querido contar una historia sobre el violín barroco, y descubrir a la gente que venga a escucharnos música realmente bella que no es demasiado conocida. Algunas de las obras que vamos a interpretar hemos tenido que adaptarlas para nuestra formación porque no todas incluían los mismos instrumentos con los que contamos en la agrupación. Personalmente, he querido mostrar el cambio y la evolución que experimenta el violín durante el periodo que aglutina el concierto. Durante los ensayos de los últimos días hemos tenido un ambiente de trabajo muy bueno, en el que todos los músicos que me acompañan han dejado patente lo mucho que les apasiona este proyecto, y eso se notará en el concierto que vamos a ofrecer el sábado.

-¿Cuál es su opinión respecto a la interpretación históricamente informada?

-Creo que es muy importante, y hay grandes músicos en la actualidad que desarrollan una labor sobresaliente en este campo, por ejemplo Roger Norrington, y ellos me ponen al día sobre lo que hacen. Al final del día me pregunto si esta concepción de la interpretación musical es correcta o no, porque incluye tocar con un arco distinto, con posiciones distintas? y la conclusión a la que llego es que este tipo de interpretación es algo que está en la propia mente del intérprete. Intento investigar al respecto todo lo que puedo, pero al final me gusta añadir siempre a mis interpretaciones mi propia visión personal.

-Desarrolla una importante labor como activista y utiliza su carrera artística para concienciar a más gente ¿Por qué es tan importante para usted?

-Aunque parezca algo novedoso no lo es, hay mucho músicos de pop que utilizan su posición en el mundo para intentar mejorar las cosas, y creo que los artistas de clásica debemos involucrarnos más. Por supuesto hay gente como Barenboim o Gabriela Montero haciendo cosas magníficas, pero debería haber más compromiso. Personalmente creo que nosotros tenemos el deber de concienciar a la gente y de llamar al diálogo.

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