El cambio de la calle Calvo Sotelo (en referencia al político José Calvo Sotelo) por el del escritor Federico García Lorca ha levantado ampollas en la ciudad. Oviedo se divide entre quienes defienden la figura de Calvo Sotelo y lo desvinculan por completo del franquismo y quienes ven en él el origen de la Guerra Civil. A él, jurisconsulto y ministro de Hacienda durante la dictadura de Primo de Rivera, se le atribuye la frase:"Sería loco el militar que no estuviese dispuesto a sublevarse a favor de España y en contra de la anarquía, si ésta se produjera". El 13 de julio de 1936 fue detenido en su casa por un grupo que incluía a miembros de las fuerzas de seguridad y durante el traslado fue asesinado con un tiro en la cabeza. El suceso tuvo un hondo impacto entre la clase media española y provocó que el general Francisco Franco decidiese unirse al golpe de Estado. El historiador Javier Fernández Conde, muy crítico con la retirada de Calvo Sotelo del callejero de Oviedo atribuye esta modificación "a un profundo desconocimiento de la historia, porque nada tuvo que ver con el franquismo".
