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Los inquilinos de Pablo Alonso Rato denuncian "abandono absoluto" por parte de Vipasa

En La Corredoria 220 familias sufren averías como la del portón del garaje, donde hubo robos hace seis meses

Los bajos llenos de basura. MIKI LÓPEZ

Paulino Villar, presidente de comunidad del número 3 de la calle Pablo Alonso Rato (La Corredoria) sujetaba frente a la puerta del garaje una pila de escritos enviados a la empresa pública Viviendas del Principado de Asturias S. A. (Vipasa) y a Patrimonio. Y también denuncias presentadas ante la Policía. El objeto de la documentación, los numerosos desperfectos que sufre su edificio y otros tres de la zona. "En total 220 viviendas", destacó ayer junto al portón del aparcamiento, que "no funciona desde hace un año". "Hace seis meses entraron y se llevaron radios de los vehículos", comentó para criticar después que los operarios de Vipasa, propietaria de los pisos, "vienen, echan un vistazo, toman nota y olvídate. Es un abandono absoluto".

Las escaleras interiores de los edificios, además, tienen grietas producto de la humedad que esperan reparación. "Dicen que es culpa nuestra. ¿Pero cómo va a ser culpa nuestra si las filtraciones vienen de fuera?", lamentó Paulino Villar, indignado, como muchos otros inquilinos. En el patio al que dan los portales hay unos bajos que nadie usa y en los que se acumulan los problemas. Y la basura. "Vas a Patrimonio y son de Vipasa y vas a Vipasa y son de Patrimonio", denunció el presidente de la comunidad antes de hacer hincapié en que los olores, sobre todo en verano, son una molestia constante. No solo eso. "Yo tengo un perro en casa y hay ratas ahí que son más grandes", resaltó.

Pero además de las reparaciones de las que debería hacerse cargo la propiedad, los vecinos sufren daños constantes en las instalaciones: "El vandalismo nos cuesta unos 1.500 euros al mes". Por eso llegaron a solicitar la construcción de una comisaría de proximidad en los bajos comerciales. "El Ayuntamiento dijo que no contaban con suficientes efectivos", lamentó Villar para recordar después que uno de los ascensores fue objeto de un incendio. Aunque admite que Vipasa si acometió algunas obras, comentó que "va pasando el tiempo y nadie hace nada. Cuando le quieran meter mano va a salir mucho más caro".

Fuentes de Vipasa, por su parte, aseguraron ayer a este periódico que trabajan para resolver las deficiencias pero "con distinta urgencia en función del tipo de avería". Detallaron que a mediados de noviembre se dio orden de reparar el portón y que "lo arreglarán la semana que viene". Las humedades en la escalera, "dado que es un tema menos urgente, se acometerán a principios del próximo año". La empresa pública, que apuntó que han realizado este ejercicio en sus inmuebles reparaciones "de las que se beneficiaron 4.000 vecinos", destacó que este mismo año, además del ascensor, se realizaron otros trabajos de mejora en Pablo Alonso Rato.

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