Ya se halla todo el pescado vendido y únicamente hay de nuevo que ha entrado en fase de reparto. Los nuevos nombres de las calles de Oviedo -que borran a otros que lastimaban la Memoria Histórica soportada por la ley del presidente Zapatero-, ya no tienen marcha atrás, según insinuó ayer el alcalde socialista Wenceslao López.

El Consistorio y su tripartito gobernante (PSOE, Somos e IU), han pasado ya página al expediente, ya que "legalmente ya está hecho y el cambio de nombres se efectuó el mismo día que se tomó la decisión en el Ayuntamiento", manifestó el regidor socialista.

Lo que ahora sí se ha puesto en marcha es la "preparación de la logística de la comunicación de dichos cambios a los vecinos y diferentes entidades, como pueden ser las empresas que suministran servicios de todo tipo, telefonía, agua o electricidad", apostilló Wenceslao López.

La finalidad es que "esas empresas puedan proceder a un cambio automático de los domicilios y tratar de evitar al máximo que los ciudadanos tengan que andar dando vueltas haciendo cambios. En la medida de lo posible, hay que simplificarles los trámites y ahorrarles dar vueltas", sentenció López.